Hasta pronto Leandro. Por José Manuel Serrano
El lunes, mientras entrenaba en la Escuela de Tauromaquia de Salamanca, me llegó un “WhatsApp” que me quedó sorprendido. Decía que Leandro se había retirado. Lo primero que hice es mirar en los portales de internet si era una broma o algo, pero no, efectivamente las noticias daban eco de la retirada del maestro Leandro.
José Manuel Serrano
Un torero que precisamente se hizo en la misma sede donde yo me encontraba, a las órdenes del maestro Juan José, y que desde que dio sus primeros pasos dejó claro de la clase de torero que es. Ya despuntó en sus inicios y se convirtió en un novillero muy importante. En 2001 se convirtió en líder del escalafón con un total de 68 festejos (en 2014 José Garrido fue líder con solo 31 festejos).
Tomó la alternativa un 13 de mayo de 2002 en la feria de San Pedro Regalado de Valladolid de manos de dos auténticas figuras del toreo como los maestros Paco Ojeda y José Tomás. Cortó tres orejas esa tarde siendo el triunfador de la misma. Ese año de su alternativa toreó en ferias importantes como Zamora, Santander, Valladolid o Zaragoza.
En estas 13 temporadas de alternativa, Leandro ha podido pisar casi todas las plazas importantes de España dejando una huella en casi todas ellas. En Las Ventas ha cortado dos orejas, la última el pasado 24 de agosto a un toro de Antonio Bañuelos, en Sevilla perdió una puerta del príncipe ante toros de Celestino Cuadri, en Bilbao tuvo una gran tarde de toros ante toros del maestro Joselito, en Valencia una oreja con fuerza ante toros de Alcurrucén, en Santander se le recuerda una gran tarde ante toros de El Puerto de San Lorenzo. La pena de su gran trayectoria es su mal manejo de la espada, sino, pienso que sería figura del toreo porque es de los que mejor compone y torea de todo el escalafón, tiene un gusto personal que hace transmitir mucho al público y al buen aficionado.
En Valladolid ha toreado un total de 20 tardes, estando ausente las temporadas 2006 y 2014. Ha cortado un total de 20 orejas y saliendo 6 veces a hombros. He estado en la mayoría de las 20 tardes pero sobre todo me acuerdo de tres: una faena a un toro de ‘Fraile Mazas’ en 2004, a un toro de Torrestrella y la faena a un toro de El Torreón en la última tarde de José Tomás en Valladolid.
Espero y deseo que el maestro Leandro vuelva en un futuro a los ruedos, porque yo pienso que el toreo necesita en los carteles gente como él: un torero que sabe torear muy bien y que lo ha demostrado en las plazas que ha pisado. Y por qué un torero de su clase no se merece que su última tarde sea la de La México. Si se retira, que sea como se lo merece, por la puerta grande.