El veranillo. Capturas escritas de Saúl N. Amado

Diez de noviembre y en las calles se sigue respirando el olor del buen tiempo. Parece increíble que en este mes todavía podamos salir con una “chaquetilla” o un jersey; el caso es que las temperaturas no son las propias de una estación otoñal que pisa el acelerador para llegar a la Navidad –o hacen que lo pisemos–.

El tiempo siempre ha sido el típico tema de conversación cuando se nos presenta una ausencia de la misma, no obstante, en estos días por estas tierras de Castilla se está convirtiendo en un verdadero protagonista. Por unos instantes nos olvidamos de los problemas que nos rodean y es el buen tiempo el que llena nuestras redes sociales de fotografías e, incluso, tiene el privilegio de que más de un medio de comunicación le dedique algunas de sus páginas.

Parece que San Martín y su veranillo se han adelantado y todavía quieren hacer de las suyas por estas lindes. Muchos son los que se han atrevido este fin de semana a revivir –o recordar– el famoso botellón, propio de esas noches de verano donde el cielo queda inundado de estrellas y los grillos cantan hasta la madrugada. Y no es para menos.

No, no se confundan. No he querido hablar en mi columna de hoy del tiempo porque no tenga tema que tratar y utilice esta socorrida vía de escape para lanzar mis Capturas escritas. No. Hoy el tiempo, las buenas temperaturas y el veranillo son los que dan vida a un diez de noviembre de 2015.

Disfruten, por favor.