Las Aulas de Cultura de la provincia de Valladolid celebran tres décadas
La Diputación de Valladolid celebra el 30 aniversario de las Aulas de Cultura con un acto en el que participan más de 500 alumnos de toda la provincia. A lo largo de estos años, más de 30.000 personas se han beneficiado del proyecto formativo de las Aulas de Cultura, que en la actualidad llega a más de 5.000 alumnos.
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El presidente de la Diputación de Valladolid, Jesús Julio Carnero, ha inaugurado el acto conmemorativo del 30º aniversario de las Aulas de Cultura de la Diputación que, bajo el lema “30 años aprendiendo”, se celebró ayer en el Teatro Zorrilla de la capital vallisoletana.
En su intervención, ante más de 500 alumnos llegados de toda la provincia, Jesús Julio Carnero ha recordado como “en 1984 un grupo de personas iniciaron en Renedo de Esgueva, con más ilusión que medios, un proyecto educativo y cultural para contribuir al desarrollo personal de las mujeres y los hombres que viven en nuestro mundo rural y, con ello, al enriquecimiento de nuestra provincia”.
Tras asegurar que hoy celebramos el 30 aniversario de un programa que ha dinamizado y transformado el panorama cultural de la provincia, el presidente de la diputación se ha dirigido directamente a los alumnos participantes para asegurar que “el éxito de este programa se debe sin duda alguna a todos vosotros, a las alumnas y alumnos, a las mujeres y hombres de nuestros pueblos, pues sin vuestra inquietud intelectual nada sería posible”.
Junto a ello ha destacado “la valiosa contribución de los profesores, siempre dando lo mejor de sí mismos para atender las necesidades formativas y culturales; y como no, a la implicación de los municipios contribuyendo a hacer realidad el deseo de aprender de sus vecinos”.
Formación a la demanda
El presidente de la Diputación ha recordado también que la oferta formativa se ha ido adaptando a las necesidades y demandas de los usuarios, evolucionando desde procurar las competencias básicas con programas de alfabetización a potenciar aspectos formativos vinculados con el aprendizaje de idiomas como el inglés o el alemán, materias como la literatura, el cine o el medio ambiente, y las nuevas tecnologías.
En este sentido ha destacado “la apuesta que desde la Diputación de Valladolid hemos realizado por compaginar los contenidos formativos con las nuevas tecnologías, fomentando vuestra participación a través de los blogs y de las redes sociales (Facebook y Twitter), lo que también ayuda a conectaros con vuestros hijos y nietos”.
Igualdad de oportunidades
Jesús Julio Carnero ha asegurado que “este Programa es una muestra del compromiso de la Diputación Provincial de Valladolid con la cultura, con el conocimiento y con la igualdad de oportunidades”, lo que se pone de manifiesto en que el 80% del alumnado son mujeres del mundo rural. “A vosotras quiero agradeceros vuestra participación activa en este proyecto educativo, puesto que sin vosotras nuestra sociedad y nuestro mundo rural no sería igual. Demostráis que se puede trabajar duramente llevando una casa, criando y educando a vuestros hijos y compaginarlo todo ello con el deseo de aprender”.
Por último ha asegurado que este programa está concebido para las mujeres y los hombres que viven en nuestros pueblos. Un programa “que os hace partícipes de la vida cotidiana, que aprovecha vuestra sabiduría y experiencia, compartiéndola entre generaciones, enriqueciéndonos como personas y como ciudadanos comprometidos con el desarrollo de nuestra provincia”.
30 años aprendiendo
Jesús Julio Carnero finalizó su intervención recordando unas palabras de Miguel Delibes en las que el escritor vallisoletano afirmaba que “para mejorar nuestro nivel moral necesitamos educación, educación y educación. Incluso educación del gusto”. Palabras que sirvieron de introducción a la intervención de Germán Delibes de Castro, que pronunció la lección inaugural del encuentro centrada en la figura de su padre, bajo el título “En las Aulas con D. Miguel Delibes”.
Posteriormente, la jornada continuó con la exposición y puesta en valor de los programas de aprendizaje puestos en marcha en cada una de las zonas de actuación de las Aulas. Cada zona, tanto alumnado como profesorado, ha decidido presentar un hecho pedagógico acompañado con vídeos o recursos tecnológicos de informática y/o artes escénicas.
Así, la zona educativa de Medina del Campo, primera en intervenir. A través de una exposición teórica y un vídeo de 8 minutos ha mostrado como se han convertido en una de las zonas más innovadoras, de la que han nacido programas como Fronteras de Sal (exposiciones, grandes unidades didácticas y nuevas tecnologías) y ha desarrollado el primer programa europeo Coemius para reforzar la dimensión europea de la educación, promoviendo la movilidad y la colaboración entre centros.
La zona educativa de Olmedo ha realizado una presentación teórica, apoyada en proyección de pps, en la que ha realizado un recorrido evolutivo tanto de los espacios donde se desarrollan las Aulas, como del desarrollo psicológico e implicación en este proceso por parte del alumnado.
Por su parte, la zona educativa de Medina de Rioseco, la que más municipios acoge y la de población más dispersa, ha presentado a través de una exposición teórica y un vídeo de 10 minutos, la evolución de la línea pedagógica que se ha seguido. Han pasado de satisfacer inquietudes prácticas y de justificar la necesidad de salir de casa, a la actual situación en la que destaca el placer de aprender, el disfrutar del compartir contenidos y el satisfacer los deseos de desarrollarse tanto personal como culturalmente.
La primera parte ha finalizado con la representación teatral Seis operaciones y un funeral, que ha tenido lugar tras la presentación de la zona de Laguna de Duero que ha querido poner en valor el proyecto desarrollado en esta zona sobre la música tradicional de Castilla y León en las Aulas de Cultura. Su comunicación “Las Aulas de Cultura, trovadores de emociones” supone la puesta en valor de una propuesta pedagógica, que implica un desarrollo cultural de la música tradicional castellana, además de contar, optimizar y valorar los recursos culturales existentes en la provincia de Valladolid.
Conclusiones
La segunda parte se ha iniciado con la exposición de la zona educativa de Tordesillas, que a través de una presentación teórica, una perfomance educativa y la proyección de un vídeo, ha presentado la labor pedagógica del proyecto “Mar de incertidumbres”, que en este curso cumple seis años de andadura. Es un trabajo de cooperación y fusión pedagógica en la que intervienen tres disciplinas: la literatura, la informática y el idioma.
Por su parte, la zona educativa de Tudela de Duero ha llevado a cabo dos presentaciones: “La sinergia cultural existente en las Aulas” y Los ratones ya no me asustan”. La primera de ellas constata la realidad que representa el intercambio de conocimientos espacios culturales y recursos pedagógicos de las propias Aulas de Cultura. La segunda, el proceso seguido desde la complejidad del aprendizaje de las nuevas tecnologías hasta el punto de comprender que su uso ayuda a mejorar la calidad de vida de las personas en el medio rural.
Tras una exposición de la evolución de los grupos de idiomas plasmada por los dos profesores y cuatro alumnos de estos grupos, las ponencias han finalizado con la zona educativa de Peñafiel, que presentó también dos trabajos. El primero sobre el voluntariado de la mano de las Aulas, y el segundo con una representación teatral sobre el Greco, como homenaje en el Centenario de su fallecimiento.
La jornada ha concluido con una actuación del grupo Las Pituister, que ha ofrecido las conclusiones de forma teatralizada, y con la valoración de las mismas a cargo de la coordinadora de las Aulas de Educación y Cultura de la Diputación, Natividad García Hernández.
Aulas de cultura
Las Aulas de Cultura se iniciaron en Renedo de Esgueva en 1984 con sólo 15 alumnos. Hoy, 30 años después, las Aulas llegan a 189 municipios distribuidos en 7 Centros Territoriales de Educación Adultos ubicados en Laguna de Duero, Medina del Campo, Medina de Rioseco, Olmedo, Peñafiel, Tordesillas y Tudela de Duero. Esta distribución es administrativa, porque la mayor parte de las actividades se desarrollan en pequeños municipios. De hecho, el 86% de las intervenciones se realizan en municipios de menos de 200 habitantes.
En este curso 2013-2014 cuentan con más de 5.000 alumnos distribuidos en 235 grupos. El 80% del alumnado son mujeres, aunque en los últimos años se ha incrementado la presencia de hombres. Del mismo modo, cada año se incorporan personas más jóvenes, aunque la edad media sigue siendo alta, 73 años.
El programa se desarrolla gracias al trabajo de 23 profesionales del mundo de la educación pertenecientes a la plantilla de la Diputación de Valladolid y que recorren todas las localidades en las que intervienen las Aulas. El método de trabajo parte de cada alumna o alumno para, de una manera inductiva, crear un modelo metodológico propio y exportable que ha recibido diferentes reconocimientos.
Entre ellos destacan las menciones de Honor 2002 y 2011 de los Premios Miguel Hernández que convoca el Ministerio de Educación reconocer aquellos proyectos e iniciativas dirigidos a promover e impulsar el aprendizaje de las personas adultas a lo largo de toda su vida y a luchar contra las desigualdades en la educación, especialmente entre los colectivos más desfavorecidos.
La Diputación de Valladolid destina a este programa anualmente casi un millón de euros, inversión que se ha mantenido a pesar de la situación de crisis. A ello hay que unir la aportación de los Ayuntamientos participantes, en total 85.445 euros este año 2014 distribuidos en función del número de habitantes y del número de actuaciones solicitadas. A ello hay unir que aportan los edificios donde se reúnen las Aulas y se encargan del mantenimiento de las instalaciones.