La Plaza Mayor de Viana se convirtió en un gran aparcamiento de vehículos antiguos el pasado domingo
La Asociación de Vehículos Veteranos de Valladolid realizó una excursión a la localidad para visitar el Nacimiento Bíblico perteneciente a la exposición “El Camino que lleva a Belén” de la que forma parte Viana junto a otras cinco localidades de la provincia y que se puede visitar hasta el 11 de enero.
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Con la excusa de la visita a la parte de la exposición “El Camino que lleva a Belén” que se encuentra ubicada en Viana de Cega y que comparten otros cinco municipios vallisoletanos, el pasado domingo se acercó hasta el pueblo una nutrida representación de miembros de la Asociación de Vehículos Veteranos de Valladolid. En una lluviosa y desagradable mañana uno a uno fueron aparcando en la Plaza Mayor hasta una treintena de automóviles con una antigüedad todos ellos superior a los 25 años, condición imprescindible para ser considerado como vehículo veterano. Entre los ejemplares que los vianeros más intrépidos que a pesar de la intensa lluvia pasaron por la plaza pudieron admirar había una gran diversidad de modelos, algunos de ellos era de marcas tan conocidas como Roll Royce, Mercedes, Fiat o Seat, presente con el añorado 600, mientras que también había piezas tan raras y espectaculares como un REO de 1928, el más antiguo de los coches que arribaron en Viana y del que posiblemente sólo queden tres ejemplares en Europa.
Tras la visita a la exposición, en la que estuvieron acompañados por su propietario, José Luis Chacel, y por el alcalde, Alberto Collantes, los ilustres visitantes compartieron un café y una pasta e hicieron entrega al primer edil de una placa en agradecimiento por la hospitalidad recibida. La Asociación realiza salidas periódicas en fin de semana por diferentes puntos de la geografía provincial y regional aprovechando sobre todo la primavera y el verano.
El Camino que lleva a Belén
Por segundo años consecutivo Viana de Cega es uno de los seis municipios en los que se distribuyen los 869 belenes de la colección particular de la familia Chacel, compuesta por misterios, portales, pesebres, nacimientos y dioramas, de diferentes estilos, procedentes de 51 países y que suman más de 5.200 figuras expuestas. Todos ellos han sido coleccionados a lo largo de más de 35 años cuando su propietario, José Luis Chacel comenzó a hacer dioramas –uno cada año- y a coleccionar Belenes. La exposición que hace dos años se organizó en la Iglesia de Santa María Magdalena de Matapozuelos y su repercusión entre vecinos y visitantes de otros municipios confirmó a Chacel el “especial interés” que sus belenes concitan en el entorno rural. Con este punto de partida y junto a Matapozulos, se sumaron a la iniciativa Laguna de Duero, Boecillo, Viana de Cega y Mojados, todos ellos donde Chacel ha tenido residencias esporádicas o una fuerte vinculación, dando lugar a la primera edición de “El Camino que lleva a Belén” realizada con gran éxito durante la Navidad de 2013. La buena predisposición de Chacel y de los 5 ayuntamientos para compartir parte de la exposición así como la incorporación de 60 nuevos Belenes ha permitido a La Pedraja de Portillo a sumarse como sexta localidad a este especial “camino”. Para Chacel las seis exposiciones son “muy diferentes y muy dignas” y por ello y por la buena respuesta del público que se está produciendo y que puede considerarse como la muestra de que el proyecto está reafirmado no oculta su satisfacción.
Respecto a la repercusión la exposición está teniendo en las diferentes localidades, el alcalde de Viana de Cega, Alberto Collantes, al igual que Chacel, cree que este debe ser el año de la confirmación de esta propuesta entre vecinos y visitantes. “A pesar de que el año pasado se dio mucha difusión en los medios a la exposición, faltó que el gran público se acercara a los pueblos a visitarla puesto que casi nos autoabastecimos de los vecinos de los propios pueblos y de amantes del mundo de los Belenes que se desplazan allá donde haya una exposición. Creo que este año está habiendo más actividad porque quizás se haya hecho más publicidad y porque se nos ha equiparado a circuitos como los de los Belenes Vivientes de la provincia con muchísima tradición”.
Lo que el visitante pude encontrar en Viana, en esta segunda edición, es un magnífico Nacimiento Bíblico con luz y sonido, con más 100 figuras y un guión narrativo con fondo musical de 15 minutos de duración. En el que todos los efectos de luz y sonido han sido diseñados por los departamentos de electrónica y acústica de la Fundación CIDAUT. La exposición se organiza en temáticas diferentes que se exponen en cada una de las localidades de ahí que como los contenidos van rotando, aún queden otras cuatro ediciones pendientes de cara a los próximos años. Además desde ayer mismo, y hasta el 11 de enero, paralelamente a las visitas a los Belenes y en colaboración con los bares y restaurantes de los pueblos se ha organizado una ruta de tapas y pinchos al precio de 2,5 euros por tapa y vino.