Deslavazado encierro el cuarto de Cuéllar

El cuarto encierro celebrado hoy ha sido un encierro complicado sobre todo en la parte del campo, donde dos toros se han escapado, uno de ellos muy cerca del pueblo. Dos de los seis toros han tenido que ser anestesiados y otro ha entrado a la plaza cerca de las 10:30 de la mañana.

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La salida de los corrales fue rápida, limpia y sin incidentes, pero en la zona de paso por la carretera de Cantalejo la manada se ha disgregó en varias  unidades de tal manera que dos toros se separaron. Uno se quedó en la zona del río, no pudiendo ser unido de nuevo a la mañana por lo que se le tuvo que anestesiar minutos más tarde y fue trasladado dormido a la plaza.

El segundo novillo de los que se separó de la manada sí que se ha podido juntar nuevamente a sus hermanos pero ha ido bastante revuelto durante todo el camino separándose junto con otro astado al llegar al embudo. Según han manifestado a esta redacción fuentes presenciales, los caballistas han logrado reunificar los cuatro toros mientras el quinto se ha escapado dirección a la zona de la gasolinera. Al igual que el primero, también se le ha tenido que anestesiar cuando los caballistas y los efectivos de la Guardia Civil lo han conseguido mantener tranquilo.

En el recorrido urbano se han vivido momentos de mucho peligro ya que la manada iba separada y algún toro ha arremetido contra las talanqueras. Han entrado tres toros disgregados a lo largo de la mañana y el último ha tardado más puesto que debido al agotamiento se ha tumbado en el recorrido. Gracias a los pastores y corredores se ha podido levantar y conducir muy despacio a la plaza dónde ha entrado hacia las 10 y media de la mañana.