LA DIPUTACIÓN DE VALLADOLID FINANCIARÁ LA CONSTRUCCIÓN Y USO DE PILONES CON FINES TURÍSTICOS
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La Diputación Provincial de Valladolid tiene previsto incorporar como obra subvencionable con fondos procedentes de los Planes Provinciales la construcción de los tradicionales y casi desaparecidos pilones.
Los pilones, prácticamente desaparecidos, eran unos recipientes cóncavos de piedra, a menudo adosados a la pared, en los que caía y se acumulaba el agua de una fuente y muy característicos de las plazas de los pueblos hasta las últimas décadas del siglo pasado. Se utilizaban fundamentalmente como abrevaderos para el ganado o lavadero para la ropa de las familias dado que la mayor parte de los pueblos tenían una economía basada predominantemente en la agricultura y en la ganadería y además las casas carecían de agua potable.
Complementariamente a estos dos grandes usos, estas construcciones sirvieron también de manera ocasional como receptáculos donde iban a parar aquellos foráneos al pueblo, conocidos como forasteros en el lenguaje coloquial, que cortejaban a una moza del pueblo con intenciones altamente libidinosas y se negaban a pagar la ‘cantarada’ que era el obsequio o cortesía -de un cántaro de vino- que los jóvenes del pueblo le imponían por ese licencioso comportamiento.
Lejos de pretender que se vuelvan a instaurar esas ‘cantaradas’, la finalidad que persigue la institución provincial al incluir la construcción de estos elementos como alternativa dentro del catálogo de las obras subvencionables en la próxima convocatoria de los planes es la de potenciar el turismo de los municipios. Se piensa que este recurso, bien gestionado por las entidades locales, puede atraer un importante volumen de visitantes a los pueblos y sobre todo a aquellos que no cuentan entre su patrimonio con monumentos o reclamos turísticos relevantes como iglesias, museos, etcétera. La idea que planea es la de darlos un uso dinámico, más allá de su contemplación, y dotarlos de actividad ligándolos, por ejemplo, al mundo de las recreaciones, tan en boga desde hace unos años.
Es por lo anterior por lo que en la baremación para cuantificar la aportación provincial y la municipal se incluirán entre, entre otras, variables como la existencia o no de bienes de interés cultural en la localidad o de recreaciones con una antigüedad mínima de diez años. La cuantía de la subvención será inversamente proporcional a la presencia de las anteriores primando así a los pueblos con menos recursos. A partir de aquí, y en ejercicios venideros, serán subvencionables con cargo a las subvenciones de tipo turístico todas las actividades que tengan al pilón como protagonista.
Como impulso a esta acción, la Diputación Provincial de Valladolid tiene previsto incluir en su programa de actividades para las próximas ediciones de INTUR y FITUR le proyección de un video promocional que muestra varias recreaciones para que el gran público puede presenciar qué utilidades se daban a estos elementos. El video mostrará, por ejemplo, cómo se conducía a los rebaños de ovejas a abrevar sin más medios que un buen lanzamiento de morrillo, un par de hábiles canes y el característico grito ‘toma, toma, toma’ de los pastores; cómo grupos de mujeres lavaban la ropa con los únicos recursos que una tabla y una pastilla de jabón de sosa y manteca de cerdo y, por supuesto, cómo los jóvenes del pueblos lanzaban ese forastero indómito que tras galantear a una moza no pagaba su cantarada.