TLP propone una moratoria de todos los proyectos de plantas eólicas y fotovoltaicas en la provincia
- Hasta la aprobación de un plan de ordenación territorial de los recursos energéticos
- El diputado Julio Pereda, del grupo provincial TLP – Izquierda Unida, Podemos, Verdes Equo, Alianza Verde, ha registrado una moción para su debate en el pleno de este viernes en la Diputación de Valladolid
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El diputado Julio Pereda, del grupo provincial TLP – Izquierda Unida, Podemos, Verdes Equo, Alianza Verde, ha registrado una moción para su debate en el pleno de este viernes en la Diputación de Valladolid, en la que pone de manifiesto los perjuicios que está provocando la proliferación descontrolada de parques eólicos y fotovoltaicos y propone la realización de un plan de ordenación Territorial que regule los recursos energéticos de Castilla y León, teniendo en cuenta la protección del paisaje, el desarrollo rural, las infraestructuras, la agricultura, la ganadería, las actividades extractivas, el turismo y el patrimonio.
Para ello, la formación de izquierdas pide a la institución regional que realice un estudio cartográfico de transición energética que analice la capacidad de carga que puede asumir cada comarca teniendo en cuenta el impacto ambiental, económico y social que acarrean estas instalaciones. Pereda también requiere que hasta la aprobación del plan se declare la paralización temporal de todos los proyectos de centrales de energía eólica y fotovoltaica en nuestra provincia.
Son numerosos los municipios que están viendo como su medio natural se ha convertido en un polígono industrial en el que se genera energía a través de aerogeneradores o placas solares que ocupan grandes extensiones de suelo rústico no urbanizable, lo que según denuncia TLP está afectando de forma muy negativa a la vida social, cultural y económica de los habitantes de los pueblos afectados.
Desde la asociación SOS Montes Torozos defienden la insostenibilidad que supone para su comarca la instalación de un macroparque con 580 aerogeneradores, lo que además de crear un paisaje apocalíptico, provoca serios problemas de viabilidad a los negocios locales, que se verán incrementados con las nuevas plantas fotovoltaicas en proyecto que ocuparan más de 3.300 hectáreas.
Por su parte, Pereda advierte que “leer todos los días en los boletines oficiales nuevas autorizaciones para la construcción de plantas de energía en la provincia da una idea de la magnitud de lo que se nos viene encima. Esto se está realizando sin ningún tipo de control, saturando el territorio, sin atender a una lógica en cuanto a protección del paisaje, a los valores naturales y a otros recursos que constituyen un desarrollo rural sostenible, lo que está generando conflicto social y más despoblación”.
Desde TLP se muestran a favor de las energías renovables, pero entienden que su desarrollo debe ser ordenado y sin causar graves perjuicios al medio rural, en el que se está mal utilizando el uso excepcional de suelo rústico y se están condenando campos enteros de por vida. Como alternativa para una correcta transición energética proponen como localizaciones para las plantas energéticas las parcelas con declaración de suelo industrial, las cubiertas de casas, edificios y naves industriales, así como las medianas o cunetas de las carreteras y vías de ferrocarril.
El viernes el pleno de la Diputación tiene la oportunidad de dar el primer paso para posibilitar un nuevo modelo para la implantación de las centrales de energía renovable. Desde TLP apuntan que ya hay otras comunidades que están legislando en este sentido. “Si Castilla y León no lo hace de forma urgente, puede que el futuro de algunos de los pueblos de nuestra provincia esté condenado para siempre” afirman.
