LA IMPORTANCIA DE UN BUEN CALZADO
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La elección de un buen calzado, ya sea tipificado para hombre o para mujer, es de vital importancia para los pies. Los pies, son la base del cuerpo humano, donde recae el peso de todo el cuerpo y también son los que reciben el impacto del bipedaje.
Más allá de la cuestión de salud, que debería primar por encima de las demás, la presión estética por el calzado, desgraciadamente, es un fenómeno que atañe a algunos colectivos en especial, sobretodo en el caso de las mujeres.
El tacón alto está asociado a una imagen de “mujer segura” y aunque en muchos casos puede ser cierto, la postura que implica encajar el pie dentro del calzado con tacón es completamente antinatural.
EL TACÓN ES UNO DE LOS TIPOS DE CALZADO QUE MÁS CASTIGA EL PIE
Problemas posturales y problemas en los pies como son los juanetes, la bola de dolor o dolor intenso en los talones son algunos de los problemas que puede acarrear el uso de tacones durante un largo plazo.
Intercalar el uso de los zapatos detacón con el zapato plano puede ser una buena solución para remediar o retardar la aparición de este tipo de problemas en algunas personas. De hecho, en algunos países es muy habitual ver como las mujeres que trabajan en oficinas o centros donde se exige el uso de tacones a sus empleadas, acuden a él en zapatillas de deporte o zapato plano para luego cambiar de calzado en el momento de fichar.
En este caso, los momentos en los que se está caminando o transportándose de ida y vuelta a casa son en los que el pie está más castigado ya que el estrés de las prisas, los intercambios entre líneas de metro y el frenesí de la ciudad añaden más estrés y sufrimiento a la base del cuerpo. Una vez se llega al trabajo, el ritmo frenético disminuye y con él la presión. Puede ser que además se tenga que estar sentada por un largo período de tiempo dónde el impacto se reduce a 0.
El uso de zapatos de tacón más bajos diseñados a partir de zapatos deportivos pueden ser la solución definitiva al sufrimiento de este tipo ya que intercalan el diseño y la comodidad para generar opciones que sean más saludables. Si quieres saber más, haz click aquí.
ES IMPORTANTE LA SUELA DE GOMA Y QUE EL PIE REALICE UNA BUENA TORSIÓN
En numerosas ocasiones se ha resaltado la importancia de las características de “el buen calzado” que no suelen coincidir con el valor estético del mismo.
Siempre se habla de que el mejor calzado es aquél que llevacordones, una suela de goma con un tacón ancho con bastante rigidez en la parte del talón con refuerzos acolchados en las partes que se resienten más y que suelen ser las que generan más problemas a largo plazo.
Además de estas características se valora muy positivamente que el calzado lleve una suela desmontable ya sea interior por completo o solamente en la mitad del zapato que brinde un apoyo firme al talón y permita una buena estabilidad torsional en cuanto a la pisada y al movimiento del tobillo.
Los materiales que respiran siguen siendo los ganadores en cuanto a adecuación de un buen calzado, primando el cuero por encima de los demás. En el último puesto encontraríamos los zapatos hechos de plásticos que a pesar de ser más económicos evitan la transpiración y hacen efecto condensación generando más facilidades para la proliferación de gérmenes y hongos.
Encontrar el calzado ideal para que la salud no se resienta es una tarea difícil pero no imposible. Hay que dejar atrás los falsos mitos de que el zapato se amolda al pie con el uso y optar por calzado que sea cómodo y ligeramente holgado desde el principio. Solo así el cuerpo lo agradecerá.