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El capotillo de la Virgen volvió a actuar en el sexto de los encierros camperos de Portillo

En 14 septiembre, 2015

En Toros

Un varón fue cogido sin más consecuencias que golpes y contusiones en la zona próxima a la entrada a la parte urbana del encierro. Además, dos caballistas sufrieron caídas a lo largo del recorrido. De los cinco toros que salieron de los corrales del Comeso, tres finalizaron el recorrido.

Entrada de uno de los toros en la Explanada de Santo Domingo.

Juan J. Villalba Pinilla

Finalizaron los encierros camperos de Portillo con un sexto festejo muy anárquico pero muy entretenido para los miles de espectadores que fueron testigos desde alguno de los diferentes puntos desde los que se puede contemplar este espectáculo.

Por ser el último día de los corrales del Comeso salieron cinco toros acompañados por la parada de bueyes. El grupo no tardó en disgregarse en varias unidades: un toro negro hizo un recorrido similar al del novillo blanco del viernes y terminó primero en las tierras frente a la antigua carretera de Segovia y posteriormente en la zona aledaña al edificio de conservación y control de la Autovía de Pinares donde sería reducido por las fuerzas vivas municipales. Este fue el único de los cinco ejemplares que no asomó el hocico por la zona urbana del Arrabal de Portillo.

Dos de sus compañeros de encierro, uno colorado y otro entre negro y colorado, aparecieron sucesivamente, y con una diferencia de unos cinco minutos, en la zona de la Explanada donde hicieron disfrutar de lo lindo a los cientos de aficionados congregados en la zona. Uno de ellos entraría finalmente en el recorrido del encierro y otro saldría disparado en sentido contrario deshaciendo en parte el camino recorrido con anterioridad y teniendo que ser capturado por los efectivos municipales.

Los otros dos novillos, uno rojo y otro negro, entraron con la bueyada y el grueso de los jinetes. El negro entró directamente a las calles del recorrido urbano del encierro y el rojo originó los momentos de mayor tensión de la mañana. Cuando estaba a punto de bajar de la Explanda directo a las calles se dio la vuelta embistiendo a un varón al que no le dio tiempo a reaccionar. El morlaco se cebó con él en la zona de setos paralela a la travesía de entrada al pueblo mientras varios mozos intentaban, tirando del rabo del animal, retirarle del cogido. Finalmente el animal soltó la presa y tras unos breves instantes en los que los mozos le citaron y recortaron acabó accediendo a la zona del encierro y posteriormente a la Plaza de Toros. Afortunadamente no hubo que lamentar más que contusiones en la cogida.

Junto a este episodio, en cuanto a incidencias se refiere, hay que hacer mención a la caída de dos caballistas durante el festejo, uno al saltar un regato y el otro en una tierra, que fueron atendidos por efectivos de al Asamblea de Cruz Roja de Portillo.

Hasta aquí han llegado los encierros camperos de Portillo, sin duda unos de los que mejores estampas ofrecen al espectador de toda la provincia y en los que los astros, la suerte o el capote de la patrona han evitado incidencias de mayor envergadura que las acaecidas y entre las que destacan las cogidas a un vecino de Montemayor, a otro de Portillo y la de este último festejo.

Desde Pueblosycomarcas.com queremos agradecer su labor a todas aquellas personas que de alguna manera han colaborado en la edición de estos artículo con sus fotografías o con información sobre el festejo y muy especialmente a la Familia Domínguez Criado de Arrabal de Portillo su trato y hospitalidad a la hora de cedernos un magnífico lugar desde el que poder ofrecer a nuestros lectores magníficas panorámicas.

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