140 NIÑOS PARTICIPARON EN EL CUARTO TALLER DE CORTES DE ALDEAMAYOR

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Ayer se celebró en Aldeamayor de San Martín, dentro del programa de fiestas de San Roque, la cuarta edición del taller infantil de cortes. La actividad, organizada por el Ayuntamiento en colaboración con un grupo de vecinos aficionado a la fiesta, arrancó en 2014 y el éxito fue tal que se ha ido repitiendo desde entonces convirtiéndose en una cita ineludible en estas fechas.

La jornada, que contó con la participación de los cortadores Trifino Vegas, Jesús Sánchez ‘Zazo’, Javier Manso ‘Balotelli’, Roberto Acebes y José Luis López ‘Ponchín’ se dividió en dos partes: la primera, de corte teórico y conducida por Beatriz Pérez Acebes, se celebró en la Sala Polivalente anexa al Ayuntamiento donde tras la bienvenida del alcalde, Fernando de la Cal, se presentó el taller, a los cortadores participantes y se proyectó un video con imágenes de talleres de años anteriores. Además, los chavales tuvieron también la oportunidad de formular alguna que otra pregunta a los jóvenes maestros y compartir con ellos una merienda.

Ya en la Plaza de Toros se llevó a cabo la parte práctica.  En el ruedo de la Monumental del Puente Canto los 140 niños participantes, de edades entre 3 y 12 años aproximadamente, divididos en 4 grupos y con sus camisetas conmemorativas, cortaron, quebraron y hasta saltaron, siempre bajo los sabios consejos y atenta mirada de alguno de los cortadores, a unos carretones empujados por un grupo de voluntarios del pueblo entre los que se encontraban dos cortadores locales, jóvenes promesas, como Carlos de León y Álvaro Pérez. Incluso se simuló un pequeño concurso en el que participaron un grupo más reducido de pequeños y en el que no faltó ni siquiera el paseíllo a los ganadores. Mientras todo esto iba sucediendo, los padres y familiares de los pequeños observaban sus evoluciones, algunos desde la grada y otros en el propio ruedo, preguntándose si dentro de unos años sus hijos, hermanos o nietos darán el salto a cortar toros de verdad.

La tarde concluyó con una foto de familia de los participantes, colaboradores y niños. Desde el Ayuntamiento de Aldeamayor se quiso mostrar el agradecimiento a los cinco cortadores y a todos los colaboradores que de forma desinteresada han formado parte hasta Aldeamayor para participar en esta amena e interesante iniciativa.

LA TÉCNICA DEL CORTE

Tras cuatro años de celebración de esta actividad hay algo que todos y cada uno de los cortadores que han participado en ella han repetido por activa y por pasiva: cuando te enfrentas cuerpo a cuerpo a un toro no se trata de salir a lo loco a encararse con él.  Por eso siempre se incide en la importancia de realizar un análisis previo del comportamiento del animal nada más salir a la plaza. Para el portillano ‘Ponchín’ la procedencia y encaste del toro, su tranco, los extraños que te puede hacer, si es más pronto o más tardo, la forma de embestir, el pitón con el que embiste o la manera en que humilla son variables que todo cortador debe analizar para saber cómo y por donde ejecutar la suerte. “A mí personalmente me gusta conocer estos factores así como la ganadería de procedencia de los toros con los que me voy a medir para conocer con qué tipo de animales me voy a enfrentar. Esto es importante sobre todo si en un concurso eres el que abre grupo puesto que vas a ir a ciegas; si estás en otro puesto y tienes la oportunidad de ver su comportamiento con otros compañeros siempre te fías de lo que ves”. Es la primera vez que este joven cortador ha participado en una actividad como esta y se ha quedado sorprendido “de la cantidad de niños que han participado y de lo bien organizado que ha estado”.  

Para  José Joaquín Villafruela, dos de los promotores de la actividad, lo que se busca con este taller es “fomentar la afición a la tauromaquia y especialmentea una parte de la misma como son las suertes a cuerpo limpio -cortes, quiebros y saltos- entre los más pequeños”.  Ambos insistían en que lo importante es hacerlos siempre bajo la premisa de que los niños sean conscientes de lo que supone enfrentarse cuerpo a cuerpo.