MAÑANA SÁBADO CABEZÓN DE PISUERGA CELEBRA LA FIESTA VACCEA DE LUGNASAC
- El contexto histórico de esta fiesta se sitúa en torno al año 140 y 50 a C., momento en que los romanos irrumpen en el poblado indígena vacceo asentado en este territorio
- Durante toda la jornada, en el poblado se instala un ‘mercado vacceo’ en el que exponen y venden productos artesanos y gastronómicos
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Mañana sábado, Cabezón de Pisuerga, celebra la Fiesta Vaccea de Lugnasac. Esta recreación histórica tiene por escenario la zona de bodegas del municipio vallisoletano de Cabezón de Pisuerga. Se celebra desde el año 2002 y se ha convertido en el evento que aglutina a un mayor número de gente venida de todas partes.
La diputada provincial, Inmaculada Toledano, acompañada por el alcalde de Cabezón de Pisuerga, Sergio García Herrero, y los representantes de la Asociación Cultural de Vacceos Lugnasac, Carlos Jimeno Velasco y Enrique Vázquez Velasco, han presentado en la Sala de Recepciones del Palacio de Pimentel este evento que es una representación popular de un día en la vida de los vacceos y su lucha contra los romanos, acompañado de bailes y juegos, rememorando así los orígenes celtíberos del municipio.
El contexto histórico de esta fiesta se sitúa en torno al año 140 y 50 a C., momento en que los romanos irrumpen en el poblado indígena vacceo, que llevaban asentados varios siglos en este territorio.
Así, se representa un poblado vacceo, y las luchas que éstos mantuvieron con la legión romana del General Lúculo, resistiendo para que no les invadiesen. A ello se añade la fiesta en honor a Lugnasac, (Lughnasadh o ‘asamblea de Lug’), de marcado carácter agrario, una ceremonia que se celebraría en agosto con la culminación de la recogida de la cosecha.
La comitiva va encabezada por los jefes vacceos, precedida por los estandartes e insignias vacceas y romanas. El desfile se dirige hacia la «aldea vaccea». Allí se celebran las bodas vacceas, en las que la reina y damas de las fiestas patronales contraen matrimonio ficticio con los guerreros vacceos.
Durante toda la jornada, en el poblado se instala un ‘mercado vacceo’ en el que exponen y venden productos artesanos y gastronómicos.
La tarde de la fiesta vaccea es para los niños. En la aldea pueden realizar talleres y juegos romanos y vacceos y la recreación de la vida cotidiana por el grupo Boquique. Por la noche se repite el desfile, con antorchas y el fuego como protagonistas. La comitiva llega al poblado vacceo, recreando luchas y litigios contra el pueblo romano. Al terminar la lucha se procede al ritual funerario de incineración en una gran hoguera del anciano más venerable. Mientras arde la hoguera, se danza alrededor.