ALDEAMAYOR CELEBRÓ SU ROMERÍA EN HONOR A LA VIRGEN DE COMPASCO, PATRONA DE LA VILLA
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Como cada primer domingo de septiembre los vecinos de Aldeamayor de San Martín se desplazaron –bien en vehículo o a pie- hasta los pinares de la zona conocida como Compasco para participar en la romería en honor a la Virgen del mismo nombre, patrona de la villa.
Los actos programados dieron inicio a las doce del mediodía con una misa en honor a esta advocación mariana, celebrada en pleno corazón del pinar, y a la que asistieron un buen número de fieles. La ceremonia estuvo presidida por el párroco titular de la localidad y Arcipreste de la zona de Pinares, José María Gil, y cantada por el coro parroquial. Frente al Altar Mayor se encontraba el mayordomo saliente Eduardo Martín Rupérez flanqueado por Luis Ángel Fernández y José María Moretón.
Finalizada la Eucaristía, y tras el canto de la Salve, dio comienzo una procesión de la imagen de la Virgen alrededor de la ermita en la que no faltaron las jotas tocadas por las dulzainas de la Asociación ‘Tierra de Pinares’ ni las danzas en honor de ‘La Pinariega’, como se conoce a la patrona de Aldeamayor.
Tras la procesión se llevó a cabo un breve acto en el que algunos de los presentes entraron a formar parte de la cofradía y acto seguido se puso en marcha la subasta de artículos donados por fieles con la que obtener fondos para la financiación de los gastos de la institución. Con la subasta concluyeron los eventos oficiales de la mañana y cada uno de los presentes prosiguió su particular jornada de convivencia aprovechando para disfrutar de un agradable día de campo.
El programa de la cofradía continuó por la tarde con el relevo en el cargo de mayordomo. A las siete en casa de Eduardo Martín Rupérez, mayordomo saliente, se impuso el medallón y se entregó la vara al nuevo mayordomo, Avelino Carlos Sanz. Desde ahí, con música incluida, se fue hasta la calle Larga donde el nuevo mayordomo impuso la medalla y entregó la vara a Ana María Sanz, nueva mayordoma, en el domicilio de una de las hijas de esta última. Desde allí todos los presentes se trasladaron al salón polivalente que tiene el Ayuntamiento de Aldeamayor en la Plaza Mayor donde los nuevos mayordomos ofrecieron un refresco. Mientras tanto la junta de la cofradía celebró el Cabildo aprobando las cuentas y libros de la cofradía. Hay que señalar que el nombramiento de camarera, junto a la inclusión de otras dos mujeres –Concepción Pérez y Dorotea Martínez- en la junta directiva, es consecuencia de la aprobación por parte de la Archidiócesis de Valladolid de los nuevos estatutos con los que se dan importantes pasos en la igualdad de derechos y deberes entre cofrades rompiendo con la tradición de que sólo los hombres podían servir la vara.
ORIGEN DEL TÉRMINO COMPASCO
El origen de este nombre se halla en las "compascua" romanas. Como explica el padre carmelita Celso Prieto Bermejo, “la lex agricola ya trataba del modo de aprovechar los pastos comunales pertenecientes a varios territorios. Este es espacio de frontera entre los términos de pueblos circunvecinos. Compasco, pues, nos evoca encuentro, diálogo, solución de problemas, aprovechamiento común y como no, un espacio religioso a partir del siglo once, en los vaivenes de la repoblación de la extremadura castellana, al sur de Duero”. Además de estas pinceladas sobre el origen de esta advocación mariana, Prieto Bermejo también resalta el sentido religioso de la celebración de Compasco. “Celebramos hoy la Romería de la Virgen de Compasco, patrona de Aldeamayor. Un lugar sencillo, una ermita modesta, un origen devocional de gente pastoril reservada y afable. Todo nos invita en este entorno a vivir con humildad”. Por último el fraile carmelita quiere invitar a reflexionar en la necesidad de mantener el aspecto religioso como pilar fundamental de esta jornada de convivencia. “La Romería hoy no debe perder de vista esta intencionalidad religiosa que ha mantenido viva la Cofradía de Compasco que desde 1654 cuida con cariño todos los aspectos religiosos, ambientales, decorativos y tradicionales. Este espacio debe mantener este clima de trascendencia, mística y soledad para elevar al hombre al sentido de propio ser. Pero también debemos cuidar este tiempo festivo de encuentro familiar y lúdico”.
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