Izquierda Unida- Alternativa por Tordesillas presenta su propuesta para la nueva tasa de basuras.
- En la misma sesión plenaria también se interesaron por el anuncio de carpa navideña en las inmediaciones de la Calle Gutiérrez Mellado, mostrándose muy críticos con el desconocimiento de la normativa por parte del alcalde
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La nueva tasa de basuras deberá entrar en vigor en los municipios antes del 8 de abril de 2025, por ello Izquierda Unida-Alternativa por Tordesillas presentó en el último pleno una serie de propuestas para que esta sea lo más justa posible. “Ya señalamos que no nos parece bien que desde el gobierno central se obligue a crear una tasa de estas características, por mucho que lo recomiende la Unión Europea, primero porque va a recaer tanto en las familias como en las empresas y segundo porque invade competencias que hasta ahora han sido exclusivas de las entidades locales” señala Juan Francisco Rodríguez Gómez, concejal de la formación, “pero también entendemos que, dado que su aplicación va a resultar obligatoria, debemos trabajar todos juntos para conseguir que esta sea lo más justa posible, aproximándonos de la mayor forma posible al requerimiento de que pague más quien más contamina” aclara.
Desde la plataforma municipalista entienden que el criterio que está siguiendo el equipo de gobierno, de una tasa en función del número de empadronados en una vivienda, puede ser válida si se conjuga con otros criterios. Por ello proponen que se aplique también un criterio por consumo de agua, “Creemos que ese puede ser el más relacionado con la generación de residuos” apunta el edil, basándose para ello en una sentencia del 13 de mayo de 2024 del Tribunal Supremo que dice que “el consumo de agua presenta una correlación positiva con la generación de residuos” dónde se añade además que “esta correlación se basa en que el consumo de agua depende, entre otros factores, del número de personas que habitan en un domicilio y su nivel de renta, y ambos son indicios explicativos racionales y suficientes de la generación de residuos, tal como demanda el principio de quien contamina paga. De aquí que resulte razonable que se atienda al consumo de agua como criterio válido para la identificación de la producción de residuos”. En el mismo sentido, también solicitaron que se hagan bonificaciones atendiendo a participación en programas medioambientales cómo la creación de compost o a criterios de renta “algo que ya se hace con otras tasas” apunta el concejal.
Aunque la moción no salió adelante Rodríguez Gómez agradeció el tono del debate y el carácter conciliador del equipo de gobierno al respecto, algo que no ocurrió cuándo en el turno de preguntas se interesó por la instalación de una carpa en las proximidades de Gutiérrez Mellado. “Creemos que puede ser buena idea cómo alternativa de ocio para la juventud pero no compartimos que se llamara a los profesionales de la hostelería para consensuarla días después de que se anunciara su instalación, además nos resulta raro que no se vayan a poner barras para la venta que pudieran haber sido gestionadas por los hosteleros y así evitar un posible impacto negativo en sus negocios”. En el mismo sentido, el edil se queja, de que “nada de eso justifica que el alcalde utilizara hacia el concejal del PSOE y hacia mí mismo el término fascista o totalitario por mostrar criterios diferentes o cuestionar la acción del gobierno, en tal caso lo único que se demuestra es un desconocimiento histórico de lo que fueron este tipo de regímenes” en relación con los términos surgidos cuándo ambos se preocuparon por la posibilidad de que en el recinto y sus alrededores se generara un macro botellón o estuvieran bebiendo menores de edad.
Aun así, para el edil de Izquierda Unida-Alternativa por Tordesillas, lo más grave ocurrió cuando el alcalde señaló que en Tordesillas no estaba prohibido beber en la calle. “Creemos que es preocupante que el alcalde no conozca la propia normativa que, cómo máxima autoridad del municipio, está obligado a hacer cumplir, pues en la ordenanza de distancias y localización de los establecimientos de venta de bebidas alcohólicas y de prevención de la drogodependencia se señala cómo infracción leve el consumo de bebidas alcohólicas en la vía pública o fuera de los espacios públicos en los que está permitido dicho consumo y aunque no existiera dicha ordenanza hay leyes de carácter superior que lo impiden” señala. Además apunta que aparte de que cualquier alcalde debería conocer sus ordenanzas, esta es fruto de una modificación del año 2015 cuándo el actual alcalde era concejal de la oposición y por lo tanto tuvo que aprobarse en sesión plenaria. En el mismo sentido cree que si no se sabe el reglamento debería haber acudido a quienes lo aplican “Lo lógico hubiera sido que hubiera preguntado a la Policía Local cómo están actuando en este tipo de situaciones, parece a veces que el equipo de gobierno tiene escasa comunicación con algunos de los trabajadores del ayuntamiento”