La Diputación de Valladolid presenta la exposición ‘SOMOS, acotaciones de un aprendiz’ de Josep Vanaclocha
La exposición puede visitarse del 14 de abril al 12 de mayo en el horario habitual de la Sala Pimentel. Habrá visitas guiadas para el público los jueves, viernes y sábado a las 19:30 horas.
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El diputado provincial de Juventud y Deportes de la Diputación de Valladolid, Alejandro García Sanz, presentó ayer en la Sala de Exposiciones Palacio de Pimentel, la exposición del pintor valenciano Josep Vanaclocha ‘Somos. Acotaciones de una aprendiz’ que se expone en la sala de la Diputación hasta el 12 de mayo.
El artista valenciano, Josep Vanaclocha (Carlet, Valencia, 1962) regresa a Valladolid, 14 años después de su exposición en la desaparecida Galería Teresa Cuadrado de nuestra ciudad (Diario de la Mar, 2001). Su nueva exposición, que permanecerá colgada en la Sala "Pimentel" de la Diputación Provincial de Valladolid, adopta como título SOMOS. Acotaciones de un aprendiz y está integrada por 34 piezas, en su mayoría de formato pequeño; tan solo algunas son algo más grandes, de hasta 140 x 100 cm.
Pep Vanaclocha ha viajado a Valladolid con obra realizada con pigmentos y resina acrílica; y en la que ha empleado diversas técnicas de collage (papel, dibujo intercalado, carboncillo superpuestos, lápiz no graso, etc.)
En estas pinturas, el artista reflexiona una vez más sobre el más universal de los idiomas compartidos por los humanos : el idioma del sentimiento, el idioma del amor que regula las relaciones interpersonales y que nos construye como personas
El autor continúa empeñado en "aprender a vivir con el arte" y en explicar, con él –con el arte– su íntima necesidad de ver la vida desde y a través de ese mismo amor. La elección de Pep Vanaclocha es la de consagrarse como “aprendiz”, adoptando, como principal argumento de vida, el camino de la experiencia sensible e intelectual y su posterior expresión a través del arte. Su trabajo está, por lo tanto, siempre incompleto, siempre inconcluso; y mantiene el dinamismo connatural a lo imperfecto:
“… La elección [del artista] puede ser consagrarse como aprendiz, intentando expresar lo que se vive y se experimenta, los pensamientos y los sentimientos, llegar a percibirse como parte del universo. Mantener el empeño y la constancia que hacen revivir las fuerzas primitivas, místicas, mágicas, musicales, rítmicas, descriptivas, conjuradoras… Un todo que no nos pertenece, pero que constituye, en sí, ese lenguaje del arte, el poder creador, mucho más poderoso que el propio artista.”