Julián Sanz, candidato del partido castellano (PCAS) a la alcaldía de Íscar
El desarrollo económico de la localidad es una de las prioridades del equipo que encabeza Julián Sanz, que pretende que Íscar, “salga de la crisis en que la han sumido los gobiernos del PP”, y recupere el protagonismo perdido en la industria de la madera, implantando una Feria de la Madera Anual, a coste cero.
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Julián Sanz, encabezará la candidatura que el Partido Castellano-Tierra Comunera (PCAS-TC) presentará por ÍSCAR (Valladolid) en las elecciones municipales del 24 de Mayo, con el objetivo de dar un giro total a la gestión municipal, apostando por “generar alternativas de desarrollo económico, atracción de empresas y creación de puestos de trabajo en la localidad, y por auditar las cuentas del Ayuntamiento, fomentando la transparencia y la participación ciudadana, para lo cual consideran imprescindible, desplazar al PP del gobierno en Íscar, que lleva ejerciendo el poder de forma ininterrumpida por espacio de 32 años” señalan desde el partido.
La candidatura que encabeza Julián Sanz, y que aspira a hacerse con la alcaldía de la Villa de Íscar, hará un análisis exhaustivo de los gastos, contratos y obras realizados por anteriores equipos del gobierno del PP, mediante la realización de una completa Auditoría, ya que tienen serias dudas de la correcta gestión de los presupuestos municipales en los últimos años. “Hay que recordar –señala el comunicado de prensa recogido por esta redacción- que el Ayuntamiento de Íscar ha manejado en los cuatro años de la última legislatura cantidades cercanas a los 17 millones de euros, sin haber conseguido frenar la emigración de jóvenes de la localidad, ni haber atraído empresas o actividades económicas a la villa, y habiendo dedicado a inversiones porcentajes inferiores al 10% del presupuesto total, muy por debajo de la media de los ayuntamientos españoles, al tiempo que se han mantenido impuestos y tasas
extraordinariamente elevadas”.
Los castellanistas del PCAS-TC, apuestan por la transparencia municipal, limitando los sueldos y dietas del alcalde y concejales, recortando “gastos innecesarios y el despilfarro”. Julián Sanz y su equipo apuestan por rescatar la “carísima actual gestión del agua”, actualmente en manos de la empresa AQUALIA, pues consideran que el agua es un bien de interés público y no un ámbito para la realización de negocios privados. Cuestiona también la candidatura castellanista la utilidad de algunas obras como la plaza de toros, mientras sería necesaria la ampliación del Centro Médico.
El desarrollo económico de la localidad es una de las prioridades del equipo que encabeza Julián Sanz, que pretende que Íscar, “salga de la crisis en que la han sumido los gobiernos del PP”, y recupere el protagonismo perdido en la industria de la madera, implantando una Feria de la Madera Anual, a coste cero y facilitando la instalación de empresas e industrias, sin favoritismos, para lo cual reducirán los impuestos y tasas que pagan los vecinos de Íscar y aquellos empresarios que deseen invertir en la localidad, y crear puestos de trabajo en la villa, y apostarán por la Industria de
Transformación de la Madera y los Trabajos de Carpintería, probablemente de los mejores de todo el mundo, como uno de los pilares para el resurgir industrial y económico de Íscar. Los integrantes del PCAS-TC establecerán medidas que favorezcan en prestaciones sociales o contrataciones laborales a aquellas familias cuyos miembros estén todos en paro y cuenten con menores de edad, y aquellos sectores sociales más afectados por el impacto de la crisis económica.
La fuerte vocación social de la candidatura que impulsa en Íscar PCAS-TC, se evidencia en que Julián Sanz, de 44 años de edad, casado, con un niño de 6 años y transportista de profesión, fue 12 años voluntario de Cruz Roja Española, sabiendo perfectamente lo que es ayudar a la gente más necesitada. Su candidatura, será inclusiva, y estará integrada por personas representativas de todos los sectores sociales de la localidad, y aspira a conseguir la mayoría social en Íscar y poder implantar las políticas transformadoras que Íscar necesita.
