Cruz Roja en Valladolid atiende a 182 personas sin hogar a través de la Unidad de Emergencia Social durante 2014
Una treintena de voluntarios y voluntarias colaboran en el proyecto. La UES constituye uno de los servicios de atención inmediata a personas sin hogar que Cruz Roja está reforzando a través de su llamamiento de ayuda Ahora + que nunca.
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La exclusión social es el resultado de un grave proceso de desigualdad en la distribución de la renta, en la participación social y, en definitiva, en la satisfacción de las necesidades humanas. Hay personas que viven, trabajan o deambulan por la calle debido al desconocimiento de recursos existentes, a la falta de capacidades y/o motivación para el afrontamiento de su realidad, por haber sido expulsados de otros recursos o por ser una decisión personal de vida. Dichas personas generalmente presentan múltiples patologías y no tienen expectativas de futuro.
La Unidad de Emergencia Social Nocturna (UES), que Cruz Roja en Valladolid puso en marcha en el último trimestre de 2013, tiene por objetivo mejorar la calidad de vida de las personas sin hogar y promover su reincorporación a la red de recursos sociales existentes en la ciudad, en la que Cruz Roja tiene un papel señalado ya que lleva a cabo un proyecto de atención integral de personas sin hogar y por otra parte, gestiona el Albergue Municipal.
A lo largo de 2014, desde la UES se han atendido a 182 personas sin hogar cuyo perfil medio corresponde a un hombre de entre 35 y 49 años de origen español. Durante el pasado año se realizaron 155 salidas en las que se han hecho 1.601 visitas.
Esta labor ha sido posible gracias al apoyo y colaboración de una treintena de voluntarios y voluntarias que efectúan una ruta nocturna por distintos puntos de la ciudad. Las personas que componen la Unidad forman un equipo que integra distintas disciplinas como el trabajo social, la asistencia sanitaria, la psicología, etc. La clave es ofrecer a las personas sin hogar un servicio de proximidad que garantice una respuesta rápida ‘in situ’, frente a situaciones de emergencia social, actuando como puente entre la calle y la red de atención.
La UES se basa en los principios de voluntariado, humanidad, neutralidad y de injerencia mínima, es decir, los equipos de voluntarios y voluntarias que atienden a estas personas actúan siempre bajo demanda de éstas, ofreciéndoles productos preparados para cubrir necesidades básicas (alimentos, bebidas calientes, artículos de higiene, de abrigo…), primeros auxilios, información y orientación sobre los recursos disponibles y acompañamientos siempre que la persona esté interesada.
El trabajo de Cruz Roja con estas personas en situación de extrema vulnerabilidad va mucho más allá de medidas asistenciales, actuando como puente hacia otros recursos orientados a la inclusión social y a través del trabajo en red y alianzas con distintas organizaciones.
Este tipo de intervenciones son algunas de las medidas que Cruz Roja está reforzando a través del llamamiento de ayuda lanzado en 2012 con el fin de incrementar la asistencia de Cruz Roja a las personas en situación de extrema vulnerabilidad.