LA IGLESIA DE SAN AGUSTÍN DE LOS AGUSTINOS FILIPINOS ALBERGARÁ ‘VOCES DE PASIÓN’
Pueblosycomarcas.com; @PueblosComarcas
La concejala de Cultura y Turismo, Ana Redondo, presentó hoy el ciclo de música ‘Voces de Pasión’, antesala a la Semana Santa, que celebrará su mayoría de edad entre el 29 de marzo y el 13 de abril con una programación que suma doce conciertos de música coral, órgano y violonchelo y que, por primera vez, tendrá lugar en la Iglesia de San Agustín de los Agustinos Filipinos.
El programa sube el telón el viernes, 29 de marzo, con un concierto de órgano, clave y flauta a cargo de Diego Crespo y de Marta Femenía. El sábado 30 de marzo subirán al escenario el Coro de la Universidad de Valladolid y la Camerata Coral de la Universidad de Cantabria, tomando el relevo, al día siguiente, las agrupaciones Voces Blancas y Coro Joven de Valladolid e In Paradisium.
Voces de Pasión retomará su actividad el siguiente fin de semana con los conciertos del Coro de Voces Graves de Madrid (viernes, 5 de abril), Coral Harmonía (sábado, 6 de abril) y Álterum Cor (domingo, 7 de abril).
Debido a la cercanía de la Semana de Pasión, el ciclo intensifica su programa con actuaciones diarias. Así, durante la semana, el público podrá disfrutar de la Coral Vallisoletana el lunes, Coro Musicalia el martes, un recital de Proyecto Croce el miércoles, del Coro Interludio de Burgos el jueves y del concierto de violonchelos y recital de poesía que ofrecerán Iris Azquinezer y Tachia Quintanar el viernes.
Por último, ponen el broche al programa, el sábado 13 de abril, las agrupaciones XYK Singers y Deeply Sacrae.
El Ayuntamiento de Valladolid, a través de la Fundación Municipal de Cultura, y con la colaboración con la Junta de Cofradías de Semana Santa de Valladolid, organiza el ciclo Voces de Pasión; una programación musical que anticipa la celebración de la Semana Santa.
‘Voces de Pasión’ es un ciclo consolidado y en su dimensión más artística «nos planteamos retos de futuro que ya empiezan a dibujarse en la presente edición», resaltó Redondo. «El principal reto es ofertar una programación atractiva que mantenga la identidad del ciclo a la vez que se abre a propuestas singulares y originales que exploren nuevas formas y lenguajes con los que la música se adentra en los límites de lo espiritual, de lo sagrado trascendiendo a lo estrictamente religioso», concluyó.