LOS VECINOS DE SIMANCAS PROPONEN LA RECUPERACIÓN DEL ENTORNO URBANÍSTICO DEL ARCHIVO MEDIANTE UNA VARIANTE DE LA A-62
Pueblosycomarcas.com; @PueblosComarcas
El anuncio del proyecto del Ministerio de Fomento de ampliar a tres los carriles de circulación en la autovía A-62, ha unido a un amplio grupo de vecinos de Simancas, que han constituido recientemente una plataforma en la que colaboran personas con perfiles y cualificaciones muy diferentes, pero que coinciden en una idea fundamental: el actual trazado de la A-62 en su travesía de Simancas no puede ser ampliado a tres carriles en superficie, por lo que es necesaria una variante que en su momento no se hizo.
Los vecinos de Simancas destacan que la ampliación de la A-62 no solamente agravaría los problemas de barrera urbana, ruido y contaminación actuales, sino que deterioraría aún más el entorno urbanístico del Archivo, convirtiéndolo en un lugar totalmente deshumanizado e invadido por el tráfico. “Una situación como ésta es impensable en cualquier Estado europeo occidental”, sostienen. Según ellos, un monumento nacional como el Archivo, con el tesoro documental que encierra y su carga de simbolismo histórico es una joya que debiera ser mimada en lugar de arrinconada entre las curvas de una enorme autopista.
Muchos vallisoletanos, dicen los vecinos, no son conscientes del contenido del Archivo y de su significado. Allí está la historia de España desde 1540, esto es, desde casi el primer momento en que España aparece como una unidad política. En cualquier Estado europeo sería un lugar de culto para los ciudadanos. Además encierra documentos esenciales para la historia de gran parte de Europa. Un portugués o un holandés, subrayan, pueden encontrar aquí los documentos fundacionales de su país, por lo que el Archivo tiene una potencialidad gigantesca como atractivo turístico que beneficiaría al conjunto de Valladolid, dada su proximidad.
Ese efecto de atracción turística y cultural se potenciaría, dicen los vecinos, si al espacio expositivo construido delante del castillo se le dotase de un contenido permanente y atractivo, como un centro de interpretación de la historia del Archivo y de la de Simancas. Es evidente que en Simancas existen numerosos atractivos para complementar la oferta y hacer que la visita merezca la pena, como es la Iglesia de El Salvador, el puente medieval, el casco histórico, el dolmen de los Zumacales e incluso otros hoy abandonados, como es el arca de recogida de aguas del siglo XVII.
Según los vecinos para materializar esta idea es fundamental potenciar el efecto escénico usando el espacio urbano libre alrededor del Archivo, gran parte del cual está ocupado hoy por la autovía. La variante de la A-62 no solamente libraría de ruidos y contaminación al casco urbano, sino que permitiría recuperar el urbanismo de toda la zona.
Si se diseñara un buen proyecto, dicen los vecinos, no solamente podría maximizarse la perspectiva del Archivo, como se hizo en Valladolid con la Iglesia de Santa María la Antigua al desaparecer las casas adosadas a la catedral, sino también generar un amplio espacio urbano alrededor del mismo abierto al turismo y al ocio. Por ejemplo, añaden, una zona de terrazas ofrecería una evidente sinergia con las terrazas del entorno del puente medieval y dotaría a Simancas de un espacio público para el ocio y la cultura del que se beneficiaría la ciudad de Valladolid, también económicamente al sumar un importante elemento de atracción turística.
Además, añaden los vecinos, con ello sería posible la recuperación de la parte del actual trazado de la A-62 que quedara libre gracias a la variante. Para la unión con el casco histórico de Simancas de la urbanización Panorama y de la carretera de Puente Duero bastaría un carril por sentido, por lo que los otros dos que hoy existen podrían aprovecharse para otros usos. Especialmente, piensan, para consolidar una ruta ciclista y peatonal que podría llegar a enlazarse con las rutas de Arroyo de la Encomienda y La Vega. Si así fuera, dicen, un enorme circuito de comunicación ciclista y peatonal se abriría hasta Valladolid y podría llegar a unirse sin excesivas dificultades con el que ya circula por el Camino Viejo y con el del Pinar de Antequera.
Por otro lado, sostiene la plataforma vecinal, el enlace de la nueva variante en la zona de Panorama podría servir como punto de conexión en el futuro para el necesario puente sobre el Pisuerga que resuelva la comunicación de la urbanización Entrepinos, donde residen más de dos mil personas. Aunque el puente de Entrepinos no formaría parte del proyecto de Fomento y quedaría como una idea para el futuro, el nuevo trazado de la A-62 dejaría preparado el punto de conexión si un día se llegase a hacer. La entrada a Entrepinos por la carretera de Pesqueruela pasaría entonces a tener una importancia secundaria y ello permitiría un tráfico más pacífico en la misma.
La plataforma vecinal se ha integrado en la mesa de trabajo abierta en el Ayuntamiento a propuesta del grupo Ciudadanos y liderada por el actual alcalde, Alberto Plaza para reivindicar la variante. En ella trabajan codo con codo con los tres grupos políticos presentes, PP, PSOE y Ciudadanos, que en un ejemplo de unidad en torno a un objetivo común están desarrollando gestiones ante diversas Administraciones para conseguir apoyos que convenzan a Fomento para que apruebe la construcción de la variante dentro de la obra prevista de mejora de capacidad de la A-62. Los vecinos piensan en las posibilidades que abriría esa variante para la estructura urbana de Simancas y comienzan a vislumbrar un proyecto al que ya le han dado un nombre: “Humanizar Simancas”.