¿Por qué no a la Ley Celaá?, por Eva Villafáñez
- “El sistema de la enseñanza concertada no fue aprobada por un gobierno de derechas, clasista, les recuerdo que fue aprobada por un gobierno del PSOE cuyo presidente en aquel momento era el SR. Felipe Gonzalez, porque era un ahorro para el Estado”
Eva Vilafáñez
Me llamo Eva Villafáñez y, voy a explicaros, cuál es el motivo por el que NO DEFIENDO la LOMLOE, más conocida como la Ley Celaá. Es muy sencillo: LIBERTAD, Y DERECHOS RECORTADOS.
Los art 27.1 27.2 y 27.3 de la Constitución Española de 1978 dicen:
- “Todos tienen derecho a la libertad de educación y a la libertad de enseñanza”.
- “La educación tendrá por objeto el pleno desarrollo de la personalidad humana en el respeto de los principios democráticos de convivencia y a los derechos y libertades fundamentales.”
- “Los poderes públicos garantizan el derecho que asiste a los padres para que sus hijos reciban la formación religiosa y moral de acuerdo con sus propias convicciones”.
El sistema de la enseñanza concertada no fue aprobada por un gobierno de derechas, clasista, les recuerdo que fue aprobada por un gobierno del PSOE cuyo presidente en aquel momento era el SR. Felipe Gonzalez, porque era un ahorro para el Estado. Y con esto no quiero politizar algo tan importante como la Educación de nuestros hijos.
Voy a contaros que supone que esta ley salga adelante:
1º. Va en contra de la libertad de enseñanza, porque no nos dejarán elegir libremente el centro educativo al que asistirán nuestros hijos.
2º No contempla lo mejor para los niños de la Educación Especial puesto que no todos pueden adaptarse a la inclusiva (Muchos pasaran a ser un número más de la clase), ni todos los profesores de la Pública podrán atender a esos chavales acorde a sus necesidades (y los docentes de la Pública son muy buenos profesionales). Esto también recorta los derechos de los otros alumnos que tienen que renunciar a parte de sus explicaciones para que esos profesores se encarguen de los niños de la Educación Especial.
3º. Vulnera el derecho que asiste a los padres de que sus hijos reciban una educación en un centro educativo de formación religiosa. Porque Sra Ministra, los hijos si son de los padres y no queremos que se nos arrebate ese derecho.
Yo elegí un centro concertado de Valladolid (Colegio San Agustín), y es un colegio que educa en VALORES, RESPETO, ESFUERZO E IGUALDAD.
Sí señores: en ESFUERZO por conseguir lo mejor de cada alumno, que quieran ser las mejores personas y que todo se tiene que conseguir con esfuerzo. Y al contrario de lo que algunos piensan, no te regalan nada. Las buenas notas se consiguen con mucho estudio y mucho esfuerzo, para así estar preparado para el futuro.
Este gobierno, con esta Ley, quiere cargarse la educación en el esfuerzo. Porque quieren que los alumnos puedan promocionar sin aprobar. Obtener una titulación sin estudiar. ¿Se imaginan la clase de profesionales que tendremos en el futuro? Claro que así obtenemos jóvenes más vulnerables y manejarlos a su antojo, para asegurarse años en el poder.
Respecto a la educación especial, estamos hablando de centros adaptados a las necesidades de cada alumno, cada uno con necesidades diferentes. Las aulas tienen ratios muy bajos para poder dedicarse en cuerpo y alma a ellos. Esos docentes tienen una formación específica. ¿Qué pasaría con ellos? ¿Más paro?
En la escuela concertada, (datos de 2019), cada alumno le cuesta a la Administración 3.249 €, frente a los 6.379 € que cuesta un alumno en la pública. Es un ahorro, al contrario de lo quieren hacernos creer.
Señores padres, no dejemos que nos quiten la libertad de poder elegir. Yo quiero una enseñanza pública de calidad, totalmente compatible con la concertada.