Los vecinos de San Miguel del Arroyo disfrutaron de uno de los fines de semana más tradicionales del año

  • Con los actos en honor de la Virgen de Fuenlabradilla, patrona del municipio

  • Foto Juanma Velasco. 

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Tradición y modernidad se volvieron a combinar durante el pasado fin de semana en San Miguel del Arroyo con la celebración de los actos en honor de la Virgen de Fuenlabradilla, advocación mariana a la que los sanmigueleños tienen encomendado su patronazgo, organizados por la cofradía que lleva el mismo nombre en colaboración con el Ayuntamiento

El programa de esta edición comenzó en la tarde del viernes con las propuestas de los bares del municipio dentro de una nueva edición de ‘Fuenlabrajoven’ aunque fue en la mañana del sábado con la colocación de las enramadas en la puerta de la Iglesia de San Esteban.

Ya por la tarde se cumplió con otra de las citas marcadas a fuego en esta tradición como es el volteo de campanas en la misma iglesia, señal de llamada para que los vecinos y visitantes se acercasen hasta ese mismo lugar a la espera de que una hora después se iniciase la romería, con la imagen de la patrona, hasta la ermita a las afueras del pueblo.

  • Foto Juanma Velasco. 

Una vez allí tuvo lugar el rezo de la última novena en honor de la Virgen y acto seguido dio comienzo el pregón pronunciado por el folclorista y músico segoviano Pablo Zamarrón. Además se rindió un homenaje a Gerardo Muñoz, de Vallelado, por su contribución a la fiesta durante tantos años. Tras la degustación de pastas y limonada se trasladó la imagen de la patrona de regreso desde la ermita hasta la iglesia de San Esteban. La jornada del sábado concluyó con el concierto de ‘Bloody Mery’ y sus magníficas versiones de temas del pop y el rock español de los 80y los 90 y con la sesión de música de NereSg en el Bar 3 Estrellas.

La devoción a la patrona se alargó también durante la mañana de ayer domingo  con la misa en su honor a oficiada por el párroco local José Manuel Caballero Yáñez. Tras la ceremonia tuvo lugar la tradicional subasta de los brazos de las andas para portar la imagen durante una procesión que, debido a la irrupción de la lluvia tuvo que acortarse con respeto a su recorrido habitual. Además, aunque se cubrió la talla de la Virgen, se decidió  volver a la Iglesia de San Esteban. Ya en el interior se cantó la Salve de Fuenlabradilla. Después y cuando escampó se pudo efectuar el típico reparto de pasteles y limonada en los alrededores de casa de la Mayordoma, Laura Bernardos, a todos los asistentes. No faltó  el grupo de panderetas de Cris  Zagaleja, de San Miguel del Arroyo.

  • Foto Juanma Velasco.