TLP pide que la Diputación deje de utilizar glifosato en las cunetas de las carreteras

  • Pereda afirma que en las cunetas de las carreteras se forman importantes refugios ecológicos que son ocupados por insectos, pequeñas aves, reptiles y polinizadores, teniendo el glifosato efectos devastadores para la biodiversidad de estos espacios

 

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El Grupo Provincial TLP -Izquierda Unida, Podemos, Verdes Equo, Alianza Verde- llevará este viernes al pleno de la institución provincial una proposición en la que pide que la Diputación de Valladolid siga el ejemplo de la de Soria y sustituya la utilización de glifosato en la red viaria provincial por métodos más respetuosos con el medio ambiente y la salud.

Desde la formación se señala, a través de una nota de prensa, que la Diputación Provincial de Valladolid cuenta con 1.434,92 kilómetros de carreteras de su titularidad con una extensión de cunetas de más de 286 hectáreas o 286 campos de fútbol. El diputado de la formación de izquierdas, Julio Pereda, denuncia que el tratamiento para el control de la vegetación de estos espacios se está realizando con herbicidas que contienen glifosato, un producto con indicaciones adversas para el medio ambiente y la salud, que la Organización Mundial de la Salud ha catalogado como potencialmente cancerígeno para el ser humano.

Pereda afirma que en las cunetas de las carreteras se forman importantes refugios ecológicos que son ocupados por insectos, pequeñas aves, reptiles y polinizadores, teniendo el glifosato efectos devastadores para la biodiversidad de estos espacios. Además, el rociado de este producto puede provocar la contaminación de los cauces de agua, habiendo estudios del gobierno que evidencian la presencia de valores altos de esta sustancia en numerosos puntos de las aguas superficiales en la zona central de la cuenca del Duero.

Las instituciones públicas deber velar por garantizar la salud pública y por aplicar políticas que favorezcan los entornos saludables. “No estamos diciendo que no haya que actuar en las cunetas y más en los puntos donde es preciso hacerlo para garantizar la seguridad vial, pero entendemos que se puede realizar una gestión del control de la vegetación de las cunetas de manera más óptima, poniendo la salud de las personas y el medioambiente por delante de la eficacia económica”, sentencia Pereda.