Sábado taurino en La Pedraja de Portillo

  • La Asociación El Raso celebró una nueva edición de su jornada anual que congregó a cientos de aficionados no sólo de la localidad sino de toda la geografía regional

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La asociación ‘El Raso’ de la Pedraja de Portillo celebró el pasado sábado una nueva edición de su jornada anual en la que el toro, dado el objeto social del colectivo, adquiere un protagonismo total.

A pesar de una cierta polémica suscitada durante los días previos, por la solicitud de la Fundación Franz Weber de suspender las actividades programadas por los supuestos incumplimientos de «hasta dos recomendaciones del Comité de los Derechos del Niño de Naciones Unidas», la jornada se llevó a cabo en la más absoluta normalidad y con asistencia no sólo de asociados y vecinos, de todas las edades, sino de numerosos aficionados de otras localidades. Además, a pesar de la continua amenaza de lluvia, el líquido elemento no hizo acto de presencia y la temperatura fue más que benigna para la época del año en la que estamos.

La propuesta de este 2024 arrancó  en el mediodía con una concentración de mini bueyes, para los más pequeños que como en las ocasiones que se ha llevado a cabo estuvo amenizado por los sonidos de las dulzainas y los redoblantes de los Dulzaineros de La Pedraja con sus siempre animados pasacalles.  Una hora después los amantes de la música y el público en general tendrán su primera gran cita con el concierto del grupo de sevillanas ‘La Alboreá’. El programa de la mañana se cerró con una comida comunitaria, a base de arroz a la paella, y con el concierto del grupo Ruedo Flamenco’ en la carpa.

Sobre la seis de la tarde, y previo acondicionamiento de última hora del ruedo, dio comienzo la cita más esperada de la jornada: una capea en la plaza de toros en la que los aficionados disfrutaron del espectáculo que brindaron dos utreros, de las ganaderías de Sánchez Urbina y de Emiliano Galán-Trilla, y una vaca ante las citas de los numerosos mozos presentes. La velada discurrió sin más sobresaltos que la tremenda cogida del segundo de la tarde a un joven de Santovenia de Pisuerga. Afortunadamente quedó en un  susto y muchos dolores tras sufrir la luxación de un hombro y no pocos golpes en el resto del cuerpo.

Como de costumbre, tras la lidia, se entregaron los trofeos al mejor corte, que fue a parar al local Pablo Martín ‘Gundi’ y a la mejor faena de muleta, para un aficionado de Logroño cuyos datos concretos desconocemos.

La última parte de la jornada tuvo como protagonista a la música con diferentes propuestas hasta altas horas de la madrugada.

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