Las residencias El Compasco y Jireysa unen su nombre a los premiados con el Premio Privilegio de Villazgo de Aldeamayor de San Martín

  • Ambos centros recibieron ex aequo este galardón en su décimo quinta edición “por su entrega y dedicación a los pacientes mayores, por su lucha continua durante todos estos meses y por haber definido protocolos y medidas de actuación para la atención correcta de personas mayores”

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Aldemayor de San Martín ha recuperado en este 2021 la celebración del Privilegio de Villazgo después del obligado paréntesis del pasado año debido a la declaración del Estado de Alarma tras la irrupción de la pandemia de la Covid 19.

El programa organizado desde el Ayuntamiento de la localidad se ha visto reducido considerablemente con respecto a años anteriores debido a las restricciones sanitarias impuestas para la prevención de los contagios desapareciendo aquellos actos que como las verbenas, los festejos taurinos o la feria de artesanía se realizaban al aire libre.

En su lugar, desde el área de Cultura de la institución se ha apostado por la celebración de eventos en espacios cerrados, en este caso en el teatro de la Casa de Cultura ‘Adolfo Suárez’, y todos ellos sometidos a las preceptivas normas sanitarias. Ejemplos de ello son la función que en la tarde del viernes pudieron disfrutar las familias de la localidad con Spasmo Teatro y Show Park o la programada para el sábado con Lady Veneno y Cia y su Cabaret en Vivo, ambas dentro del cartel de Circuitos Escénicos – Red de Teatros 2021.

Pero sin duda, lo más trascendente de esta reducida edición del Privilegio de Villazgo ha sido la entrega del premio que lleva el nombre de la conmemoración y que en su décimo quinta edición se celebró en el mediodía del sábado en la Casa de Cultura ‘Adolfo Suárez’. El galardón ha recaído ex aequo en las dos residencias de mayores de la localidad, Jireysa Aldeamayor Golf Sénior y El Compasco, “por su entrega y dedicación a los pacientes mayores, por su lucha continua durante todos estos meses y por haber definido protocolos y medidas de actuación para la atención correcta de personas mayores en todos los ámbitos donde se encuentran en esta crisis sanitarias” tal y como reza el acta que a lo largo de la ceremonia leyó el secretario general del Ayuntamiento, Eduardo Arranz Tinaquero.

Pasados escasos minutos de la una del mediodía varios integrantes de la EMT  ‘Tierra de Pinares’, de pie sobre el escenario del teatro municipal, hacían sonar con dulzainas y redoblante los acordes de la ‘Entradilla’ de Agapito Marazuela mientras premiados y autoridades presentes, locales y alguna que otra provincial, accedían a un patio de butacas en el que en pro del cumplimiento de las medias sanitarias únicamente se podía ocupar el 30% del aforo existente.

Tomó entonces la palabra la concejal de Cultura del Ayuntamiento, Ana Belén Blanco Gallo, quien tras dar la bienvenida a los presentes recordó la figura del padre Celso Prieto Bermejo, fallecido el pasado 29 de abril, que fuera impulsor junto al Ayuntamiento de esta celebración en 2002 y Premio ‘Privilegio de Villazgo 2006”. Tras leer una breve semblanza de su persona lo definió como “hombre culto, generoso, familiar, con don de gentes, amistoso, disponible para todo, vital, fuerte, luchador y muy querido en los lugares donde fue destinado”. Con un minuto de silencio en su memoria y la proyección de un video con imágenes y declaraciones concluyó este recuerdo al religioso desaparecido.

La siguiente en tomar la palabra fue Ruth Castán Torres, quien en representación de los trabajadores municipales,  a los que se ha querido reconocer por su dedicación y esfuerzo para atender las necesidades de los ciudadanos durante los meses más duros del confinamiento, fue la encargada de pronunciar el pregón de esta edición.

Sus palabras, que arrancaron con una evocación a la concesión por parte de Carlos III en 1976 del título de “villa de sí y por sí con jurisdicción civil y criminal propia” al sitio de Aldeamayor, tuvieron precisamente a la villa pinariega como protagonista resaltando alguna de sus características. “Hay cosas que no debemos pasar por alto y son las que hacen que un pueblo mantenga su identidad” resaltaba la pregonera para acto seguido destacar “el desinterés de nuestros vecinos a la hora de ayudar cuando la situación es adversa” y remarcar que “gracias al esfuerzo, sacrificio y desinterés de todos nosotros estamos consiguiendo salir lo mejor posible de esta situación que nos ha tocado vivir durante este último año”. 

Llegados a este punto, el secretario del Ayuntamiento, Eduardo Arranz Tinaquero, dio lectura al acta de la concesión de este décimo quinto premio ‘Privilegio de Villazgo’ a las dos residencias de la localidad y la edil de Cultura hizo entrega de sendas placas y copias del decreto de Alcaldía por el que se hace oficial al concesión a Verónica San Miguel y Ana Alonso en representación de ‘El Compasco’ y Jireysa respectivamente.

Aprovecharon ambas para agradecer el galardón al Ayuntamiento y en sus intervenciones coincidieron en tener palabras de recuerdo para el personal de los centros, pues el premio es una forma de valorar el trabajo tan duro que les ha tocado desempeñar durante esta pandemia; para sus familias, por ser los grandes damnificados de largas jornadas de trabajo; y, muy especialmente, para todos los mayores residentes en una y otra residencia pues no sólo han sido ejemplo los trabajadores “sino para toda la sociedad” por la forma en cómo se han adaptado a cualquier situación incluso a las nuevas tecnologías para poder comunicarse con sus familiares. También tuvieron palabras de agradecimiento a las familias de los residentes, por sus constantes muestras de preocupación desde los primeros momentos de la crisis sanitaria, y a todas las empresas, colectivos y personas que han colaborado de una u otra manera en hacer lo más llevadera posible la situación aportando mascarillas u otros materiales tan necesarios para prevenir contagios.

Tras una breve actuación de la EMT ‘Tierra de Pinares’ tomó la palabra el alcalde de la localidad, Fernando de la Cal, quien por obligaciones municipales no puedo incorporarse al acto hasta sus postrimerías. Tras felicitar a los premiados, el regidor aprovechó para agradecer la presencia de las autoridades locales y provinciales, representantes de  la oposición y representante de los trabajadores municipales.

Al tiempo que se mostraba orgulloso del comportamiento de los vecinos a lo largo de todos estos meses y manifestaba su tristeza porque esos mismos vecinos no hubieran podido llenar el teatro de la Casa de Cultura en este acto ni tampoco disfrutar de las muchas actividades que se habrían organizado un Villazgo normal, de la Cal hacía partícipes a los presentes de su esperanza de que gracias a ese comportamiento “vamos a salir adelante y el año que viene vamos a celebrarlo con más ímpetu, con más ganas y con más euforia”.

Como de costumbre, el acto concluyó con una dramatización de los sucesos acaecidos en el sitio de Aldeamayor durante 1776 y que desembocaron a su declaración de villa por el entonces rey de España Carlos III.

Las residencias Jireysa y El Compasco se suman como premiados al ya mencionado padre Celso Prieto Bermejo en 2006; Jaime Bermejo Martín en 2007; Luis Hidalgo Hontanillas y Félix de la Cal Olmedo en 2008; Felipe Ojero Tejedor en 2009, Valentín Díaz Velasco en 2010; en 2011 en Marichu Delgado Bengoechea; la Escuela de Música Tradicional ‘Tierra de Pinares’ en 2012, Teodoro Torres y Quintín Vivas en 2013, la Asociación ‘Unión Católica San José’ en 2014, el Grupo de Teatro ‘El Llano’ en 2015, el presidente de la Asociación ‘Villa de Aldeamayor’ Álvaro Sanz Ferrero en 2016; la Asamblea Local de la Asociación Española contra el Cáncer en 2017, la Agrupación Local de Protección Civil en 2018 y Carlos Golán en 2019.