Boecillo bajó el telón de sus fiestas con un programa protagonizado por los actos en honor de su patrona

  • Como cada 8 de septiembre, festividad de la Natividad de Nuestra Señora, los boecillanos honraron a ésta bajo la advocación mariana de la Virgen de la Salve con una multitudinaria misa y la posterior procesión en su honor

 

Pueblosycomarcas.com@PueblosComarcas

Tras cuatro intensos días plagados de actividades, Boecillo bajó el telón a sus fiestas en honor de Nuestra Señora de la Salve en la jornada de ayer domingo.

El programa dio comienzo con una misa en honor de la patrona del municipio. La ceremonia estuvo oficiada por el párroco local, Sebastián Aldavero, y por el fraile conventual Fray Jordi y, como marca la tradición, tras el rezo del credo y las lecturas de las peticiones, las peñas realizaron una ofrenda floral a la imagen de esta advocación mariana.

 

Ocupando los primeros bancos de las dos naves del templo erigido en honor de San Cristóbal entre 1895 y 1902, y que se quedó pequeño para la ocasión, se encontraba una amplia representación de la treintena de miembros con los que cuenta la Cofradía de la Salve, fundada en 1718. También presentes en diferentes puntos de la construcción diferentes representantes de la corporación municipal como el alcalde, Raúl Gómez Pintado, o los concejales Ángel Pérez Castellanos, Monserrat Turrado, Cristina Gil o Mª Amor Llorente.

Concluida la liturgia, y bajo un cielo soleado, se celebró una procesión por algunas de las céntricas calles de la villa amenizada por la dupla formada por el dulzainero vianero Raúl Llorente y el tamborilero vallisoletano Fernando Zarzosa que fueron intercalando entradillas y jotas, estas últimas danzadas por vecinas y vecinos en honor de la patrona..

El programa oficial se reanudó en horario de tarde con un carrusel de actividades que arrancó con propuestas para los más pequeños como una discomovida infantil y un encierro de carretones, ambos en el Parque El Tejar.

Y otro encierro, no de carretones sino de reses bravas, constituyó la última parada de la jornada de clausura de las fiestas. Como en los festejos precedentes, las reses del Raso de Portillo ofrecieron un buen juego en general ofreciendo buenas carreras en su transitar por la calle San José y permitiendo que los mozos se lucieran en el cuerpo a cuerpo e incluso, en algunos casos, con el capote. Tras el encierro tuvo lugar una suelta en la plaza de toros.

Con la verbena de la orquesta Jamaica y una sesión de discomovida se echó el candado a estas fiestas patronales de septiembre.

Artículos relacionados:

GALERÍA DE FOTOS