Anna Marchessi: «La industria debe otorgar personajes a actores y actrices con discapacidad en los que la trama no tenga relación intrínseca con la discapacidad en sí»

  • La actriz del Siglo XXI continúa con la gira de la obra de teatro Lectura fácil y estará en la reposición de Supernormales, un proyecto del Centro Dramático Nacional en torno a la diversidad funcional, además de preparar una serie autobiográfica

 

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Convocada como Actriz del Siglo XXI por la 36 Semana de Cine de Medina del Campo, Anna Marchessi, que ha hecho bandera de la representación realista de la discapacidad en el mundo audiovisual, ha reclamado dar un paso más. «Das un perfil, tienes equis características y la gente te busca por equis características. La industria funciona así. Yo creo que la industria debe caminar a otorgar personajes a actores y actrices con discapacidad que no tengan relación intrínseca con la discapacidad en sí. Es decir, que trama de los personajes en cuestión se centre en la vertiente humana, sentimental, personal, sin que la discapacidad en sí tenga relevancia».

Marchessi, que encarna a una joven con diversidad funcional sobre los escenarios en Lectura fácil, dirigida por Alberto San Juan, y con otro papel en la serie Fácil, ambas basadas en la novela de Cristina Morales de la que toma el título la obra de teatro, se ha mostrado de acuerdo con la crítica de la escritora a cómo se trata la discapacidad en la sociedad, en aspectos como la evaluación del grado de afección por parte de las instituciones. «Es imposible que todos hagamos todo bien», ha remarcado para rechazar las etiquetas que separan a personas con discapacidad y sin ella.

Anna Marchessi ha desgranado los detalles los dos proyectos desarrollados como actriz recientemente, con «procesos muy diferentes», y se ha deshecho en halagos hacia los equipos en los que se ha integrado. Ajena todavía a la industria, se encontró de repente con que era compañera de reparto de Anna Castillo y Natalia de Molina en la serie. «Ellas no paraban de repetir que el rodaje no era normal, acabábamos todos los días antes de la hora, que es muy raro, y nos reíamos todo el rato», ha recordado. En la obra de teatro, ha señalado, «el proceso de investigación nunca termina» y continúan probando cosas en cada función, mientras que en el formato televisivo resulta todo «más rápido y difícil de procesar».

Más fogueada ya en el campo del guion, la ahora actriz ha señalado las diferencias entre uno y otro trabajo. Como intérprete ha tenido que ponerse en la piel de un personaje ajeno, lo que resulta más «visceral» y «físico»; mientras que crear por escrito ese personaje significa adoptar una posición «desde lo intelectual».

Entre los próximos proyectos de Anna Marchessi figura la reposición de Supernormales, de Iñaki Rikarte para Centro Dramático Nacional, en torno a la diversidad funcional. Además, pergeña una serie con tintes autobiográficos para la que espera encontrar productora al final de una residencia de creación en la que está desarrollando esa idea, en torno a «una chica que vive en Madrid y quiere ser actriz». «Se llama De Madrid al suelo, porque yo me caigo mucho», ha dicho entre bromas y veras.

Anna Marchessi siempre ha tenido el mundo de la interpretación en la cabeza, desde niña. Ya en el colegio escribía obras de teatro, repartía los papeles en el recreo y siempre se quedaba uno para ella, ha recordado en la rueda de prensa previa a la entrega del galardón de Actriz del Siglo XXI de la 36 SECIME. Pero nunca imaginó que iba a dedicarse profesionalmente a ello, cuando la gran mayoría de los actores de este país no pueden vivir de su profesión.

«Vas a llegar a metas más importantes, pero de momento estás aquí», le ha trasladado el director de la Semana de Cine, Emiliano Allende, antes de recordarle lo que el reconocimiento tiene de reto para el galardonado y augurarle «un buen futuro como actriz».