Trabajadores del IESO Pinares de Pedrajas de San Esteban exigen la realización de test masivos en el centro educativo

  • El profesorado y el personal no docente del Instituto ha comenzado una serie de concentraciones a las puertas del Instituto
  • Piden a la Administración Educativa que, “si defiende la presencialidad en las aulas, lo haga con las máximas garantías”

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Trabajadores del Instituto de Educación Secundaria Pinares de Pedrajas de San Esteban han decidido convocar una serie de concentraciones para denunciar la grave situación por la que atraviesa el centro con un 46 por ciento del alumnado confinado y exigir la realización de pruebas a toda la comunidad educativa.

Una semana después de comenzar la reivindicación por la situación prácticamente insostenible en el instituto durante las dos primeras semanas del segundo trimestre, y de la reincorporación de las dos aulas que estaban confinadas, siguen sin tener respuesta a las exigencias que planteamos a las autoridades.

“A día 25 de enero, seguimos teniendo 11 alumnos positivos, algunos de ellos pendientes de recibir el alta médica una vez superado el periodo de cuarentena. También hay 10 alumnos que no han asistido por ser contactos estrechos o estar pendientes de pruebas”, aseguran.

El profesorado y el personal no docente del Instituto ha comenzado una serie de concentraciones a las puertas del Instituto. Piden a la Administración Educativa que, “si defiende la presencialidad en las aulas, lo haga con las máximas garantías y les protejan con medidas que van más allá de un protocolo laxo, hecho a su medida, que no defiende del virus por no considerarlos contacto estrecho.

Además, animan  al resto de centros educativos de la provincia y la región, a denunciar la situación de indefensión en la que se encuentra la comunidad educativa.

12.837 POSITIVOS POR 100.000 HABITANTES. 46% DEL ALUMNADO CONFINADO

“Desde la vuelta a las clases después de las vacaciones de Navidad, nos hemos encontrado, tanto el personal docente y no docente como los alumnos, con que la situación de riesgo a la que estamos sometidos se ha incrementado ostensiblemente. A día 20 de enero de 2021, de 148 alumnos matriculados en el centro, hay 19 positivos, 24 pendientes de pruebas o que han estado en contacto con algún positivo, y el resto, hasta 68 alumnos en total, no han venido a clase ayer y hoy por precaución. A esto hay añadir también dos positivos en trabajadoras del personal de limpieza”, reza el comunicado.

Del positivo de algunos alumnos ya se tenía conocimiento el martes, día de inicio del segundo trimestre. Ese mismo día, varios alumnos asistieron a clase cuando ya sabían algunos de ellos que habían estado en contacto con personas que eran positivo o tenían síntomas. Varios de esos alumnos confirmaron sus positivos a lo largo de esa tarde.

El miércoles 13 de enero dos de las ocho aulas fueron confinadas. A todos los alumnos de dichos grupos se les realizó el test de antígenos. Ese día, por la mañana, el profesorado comenzó a mostrar su preocupación por haber estado en las aulas con los alumnos contagiados. Desde la Dirección Provincial de Educación se indicó que sólo podían hacerse la prueba a aquellos profesores que habían estado en contacto estrecho con contagiados. A pesar de cumplir con los protocolos establecidos (uso de la mascarilla, distancia de seguridad, ventanas abiertas –a pesar del intenso frío-), muchos decidieron apuntarse al listado que se generó y envió desde el centro a la Dirección Provincial. Las autoridades sanitarias, finalmente, no tuvieron en cuenta la reclamación de hacerles las pruebas por no estar acorde con las medidas del protocolo. A lo largo de los días hasta hoy, tanto los casos de positivos como de alumnos confinados por ser contactos directos o por precaución, se incrementaron hasta las cifras que se han indicado anteriormente.

El profesorado y el personal no docente del Instituto va a comenzar una serie de concentraciones para reclamar que se hagan pruebas diagnósticas a toda la comunidad educativa, y que en casos extremos como el que nos ocupa el protocolo de sanidad de la Junta de Castilla y León sea mucho más flexible a la hora de permitir y realizar dichas pruebas.