Tordesillas regresa al siglo XVI este sábado con la llegada de la reina Juana y su séquito

  • La comitiva partirá de la entrada de la villa a las 19.30 horas y recorrerá el pueblo hasta llegar al Palacio Real en la decimonovena edición del Día de la Reina, organizado por el CIT de Tordesillas

 

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Tordesillas regresa este sábado al siglo XVI con una nueva edición del Día de la Reina, que organiza el Centro de Iniciativas Turísticas (CIT) para conmemorar la llegada en 1509 de la reina Juana I de Castilla a la villa, donde fijaría su residencia oficial hasta su muerte en 1555. La comitiva estará compuesta por la propia reina, a quien dará vida la joven Laura Martínez López; su hija Catalina, interpretada por la niña de cinco años Olivia de la Cruz de la Cruz, y su padre Fernando el Católico, a quienes acompañará su guardia personal, los monteros de Espinosa, y los monjes que transportaban el cuerpo de su esposo, Felipe el Hermoso, fallecido en Burgos, además de damas de compañía y personal de palacio. Más de 300 vecinos participarán en la recreación.

El séquito de la reina partirá a las 19.30 horas de la entrada de la villa para unirse, a las 20.00 horas, con el cortejo de su padre, Fernando el Católico, escoltado por su guardia, donde pondrán rumbo a la plaza Mayor ante la mirada de los vecinos, asomados a sus balcones. A las 20.15 horas, Hernando de Tovar, capitán de los monteros de Espinosa, ordenará abrir las puertas de la villa para dar paso a la reina. La comitiva regresará a las 20.30 horas a la plaza Mayor, donde Fernando el Católico tratará de convencer a su hija, que desconfía de él y ha ordenado regresar a Burgos, se quede en Tordesillas. Los séquitos reales llegarán a las 21.00 horas al Palacio Real, donde la reina recordará sus vivencias más dolorosas y entrará sola en el recinto, donde permanecerá encerrada durante casi medio siglo.

El Centro de Iniciativas Turísticas de Tordesillas, asociación de vecinos cuya finalidad es la promoción turística y cultural de la localidad, se propuso en 2005 recuperar la memoria de una mujer «maltratada y olvidada» y recordar que Juana I fue reina de Castilla, hija de reyes y madre de seis reyes. Convertida en una sombra por su marido, Felipe el Hermoso, aislada por su padre e ignorada por su hijo Carlos V, la reina Juana I permaneció en el olvido durante siglos hasta que, en el siglo XIX, su figura fue recuperada por el movimiento romántico, que la convirtió en un personaje fundamental de su iconografía. En la actualidad y gracias a las numerosas obras dedicadas a su vida, Juana I se ha convertido en uno de los personajes más reconocidos de la historia de España y en protagonista de un periodo fundamental en la memoria histórica de Tordesillas.