Se repiten episodios de incivismo y vandalismo en el área recreativa de Compasco en Aldeamayor

  • La reacción de los vecinos no se ha hecho esperar mostrando su repulsa pues aparte del daño material hay también un daño emocional por ser éste un paraje al que los aldeamayorenses profesan un profundo cariño dada su vinculación con la patrona de la villa, la Virgen del mismo nombre

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Fue el pasado mes de febrero cuando los amigos de lo ajeno desmantelaron varias estructuras de madera en espacios naturales de Viana y de Aldeamayor de San Martín y menos de tres meses después el área de Compasco, en la segunda localidad, vuelve a ser noticia, esta vez, por un episodio de prácticas incívicas y por actos de vandalismo en algunos de sus elementos.

Bien es sabido que el área que circunda a la ermita de Nuestra Señora de Compasco en la villa pinariega se convierte fin de semana tras fin de semana en punto de destino de cientos de personas (no sólo vecinos de la localidad sino de otras localidades) que hacen uso de sus magníficas instalaciones (merenderos, barbacoas, áreas recreativas, etc.) Ya no son ni una ni dos, sino varias, las ocasiones en que el comportamiento de muchos de esos usuarios deja bastante que desear. No se trata de una absoluta falta de los más mínimos estándares de educación, que al menos implicaría recoger los restos de basura que estas fiestas privadas generan, sino que esas reuniones de amigos o familiares desembocan en la destrucción de elementos de mobiliario o recreativos como ha ocurrido en fechas recientes.

Tras la publicación en redes sociales de varias fotos en las que se muestran las consecuencias de esos comportamientos, la reacción de los vecinos no se ha hecho esperar mostrando su repulsa pues aparte del daño material hay también un daño emocional por ser el de Compasco un paraje al que los aldeamayorenses profesan un profundo cariño dada su vinculación con la patrona de la villa, la Virgen del mismo nombre.