La Diputación renueva en Boecillo sus convenios de colaboración con Cruz Roja, Cáritas y Banco de Alimentos incrementando las cantidades

  • Los convenios suscritos alcanzan los 225.000 euros en ayudas para el alquiler de viviendas de personas en riesgo de desahucio, mujeres víctimas de violencia de género y refugiados, alimentación de escolares en situación de vulnerabilidad durante los periodos vacacionales, etc.

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El presidente de la Diputación de Valladolid, Conrado Íscar, ha firmado hoy la renovación de los convenios de lucha contra la exclusión social que la Institución provincial suscribe anualmente con Cruz Roja, Cáritas y la Fundación Banco de Alimentos. Los convenios han sido ratificados por Rosa Urbón, presidenta de la Asamblea Provincial de Cruz Roja, Guenther Eduardo Boelhoff, director de Cáritas Diocesana de Valladolid, y Jesús Mediavilla, presidente de la Fundación Banco de Alimentos, en un acto en el que también ha participado el alcalde de Boecillo, Raúl Gómez.

Conrado Íscar ha destacado que la Diputación de Valladolid vienen suscribiendo desde 2013 han tenido “siempre el mismo objetivo: defender los derechos de las personas que más los necesitan, proteger a los más frágiles que viven en nuestro mundo rural”.

Asimismo, ha recordado que, “tras sufrir un incremento de las ayudas de emergencia de más de un 650%” para hacer frente a los años más duros de la crisis económica, en los últimos años se había producido un descenso de este tipo de ayudas a causa de la mejoría económica. “Pero hoy la situación vuelve a ser más complicada. La pandemia que nos asola desde hace ya 16 meses está teniendo un efecto devastador en muchas familias, que han visto como ha empeorado drásticamente su situación a causa de la crisis económica y social generada por la COVID”.

INCREMENTO DE CASOS Y NUEVAS NECESIDADES

Conrado Íscar ha señalado que, como consecuencia de la pandemia, “las cifras del paro, que en la provincia de Valladolid ha vuelto a superar las 37.000 personas, números que no sufríamos desde mayo de 2017, a las que hay que unir 4.930 personas más que estaban en ERTE al finalizar el pasado mes de mayo, ha vuelto a encender todas las alarmas”.

Tras recordar que ya con el Plan de Choque de la Diputación de Valladolid se incrementaron las partidas destinadas a hacer frente a la exclusión social, que además amplió su atención a nuevos grupos de población afectados por situaciones de vulnerabilidad, el presidente de la Diputación de Valladolid ha señalado que “afortunadamente, en esta lucha contra la exclusión social no estamos solos, y contamos con la inestimable ayuda de las organizaciones y de todas las personas que componen lo que hemos dado en llamar el Tercer Sector, personas que prestan de manera voluntaria y altruista su tiempo, sus conocimientos, su trabajo e incluso parte de sus recursos económicos a mejorar la sociedad en la que vivimos”.

Por todo ello, y “ante las nuevas necesidades de la sociedad, hemos decidido incrementar su cuantía anual hasta los 75.000 euros para cada una de las entidades firmantes, sin perjuicio de que estas ayudas puedan ser ampliadas a través de la suscripción de posteriores adendas en su caso”.

CONVENIOS CÁRITAS Y CRUZ ROJA

Los Convenios con Cáritas y Cruz Roja incorporan las diferentes líneas de actuación que se han ido desarrollando desde su inicio en 2013, y se centran en 6 programas fundamentales de actuación.

El primero de ellos está destinado a la concesión de ayudas destinadas al alquiler de vivienda de personas individuales o unidades familiares que hayan sido desalojadas de su vivienda habitual por impago de cuotas hipotecarias o del alquiler concertado, o estén inmersas en un procedimiento judicial que desemboque en la pérdida de la propiedad o uso de la vivienda. También, las desalojadas de su vivienda habitual por una acción de desahucio ante una situación de precario y las que hayan perdido la titularidad de la vivienda, aunque no se haya producido el desalojo o desahucio al llegar a un acuerdo con la entidad bancaria y permanezcan en el mismo domicilio con un alquiler social

El segundo programa lo componen diferentes acciones formativas que supongan la promoción personal y laboral de esos colectivos. Los cursos estarán dirigidos a personas en riesgo de exclusión social siempre por derivación del Equipo de Inclusión Social (EDIS/CEAS) de la Diputación, y en coordinación con Cáritas y Cruz Roja.

El tercer programa es de la atención residencial, mediante la concesión de ayudas al alquiler, a las mujeres que ostenten la condición de mujer víctima de violencia machista.

El cuarto programa hace referencia al apoyo durante los períodos vacacionales escolares mediante la atención a las necesidades básicas esenciales, especialmente la alimentación, de los menores matriculados en enseñanzas obligatorias y de educación infantil que habitualmente utilicen los servicios de comedor de los centros educativos.

El quinto programa se centra en la concesión de ayudas destinadas al alquiler de vivienda de personas que, habiendo solicitado protección internacional a su llegada a España, no hayan podido acceder al programa de acogida de las entidades del tercer sector con competencias en este ámbito o aquellas a las que, habiéndosele denegado su solicitud de protección internacional, salgan del programa de acogida y carezcan de recursos económicos suficientes para abordar el pago de la vivienda.

Y, por último, el sexto programa se centra en el apoyo a las personas y familias en mayor situación de vulnerabilidad económica de la provincia de Valladolid, cuyo ámbito de competencias en materia de servicios sociales corresponde a la Diputación, con la entrega de productos de alimentación dentro del Servicio de distribución coordinada de alimentos de la Red de protección e inclusión de Castilla y León.

CUANTÍAS DE LAS AYUDAS

En el caso de los programas 1, 3 y 5, el importe mensual a abonar será el del coste del alquiler y, en todo caso, un máximo de 425 euros/mes. La ayuda tiene carácter extraordinario y será compatible con otras de carácter urgente o de emergencia social que se destinen a cubrir otras necesidades. Si la ayuda recibida se destina a la misma finalidad, el límite vendrá determinado por el coste efectivo del alquiler.

En el caso de los beneficiarios de las ayudas a la formación (programa 2) se les abonará una beca de transporte a razón de 0,19 € ó 0,10 € el kilómetro, en función de que personas de la misma localidad compartan o no vehículo para acudir a los cursos, o en su defecto, el coste del billete de autobús, tren o cualquier otro medio de transporte público necesario para asistir a la formación. Así mismo, se pagará del coste de la formación impartida por las entidades o centros colaboradores prescrita por el EDIS en coordinación con la entidad firmante del Convenio

En el caso de las ayudas para gastos de alimentación infantil se concederán ayudas para cada uno de los períodos vacacionales de verano y Navidad. Se usará como medio preferente tarjetas específicas, vales o cheques de compra.

Por último, para el programa 6 cada entidad dispondrá de un total de 15.000 euros para la compra de productos alimenticios de primera necesidad que procederán de productores locales de la provincia de Valladolid, cooperativas agrícolas o ganaderas y afines

CONVENIO BANCO DE ALIMENTOS

En este caso se da continuidad a la colaboración iniciada en 2014 con la Fundación Banco de Alimentos de Valladolid, con una aportación por parte de la Diputación de Valladolid.

El objeto del Convenio es la colaboración para el desarrollo por parte del Banco de Alimentos de Valladolid del programa de adquisición y distribución de alimentos en nuestra provincia y actividades complementarias.

Así, los 75.000 euros se destinarán a la atención de los gastos corrientes, principalmente de adquisición de alimentos, que en momentos puntuales puede tenerse déficit de los mismos, y que serán distribuidos por las más de cuarenta y ocho entidades en la provincia de Valladolid, que en el año 2020 atendieron a un total de 4.827 beneficiarios. En todo caso, 15.000 euros irán destinados a la adquisición de productos alimentarios a productores locales de la provincia.

También se incluirán aquellos gastos realizados para sensibilizar a la población de la necesidad de donar alimentos, mediante la organización de actos solidarios tales como conciertos, marchas populares, y otros similares, que se realizan para obtener mayor financiación o mayor volumen de alimentos para repartir entre las personas más vulnerables.