LA BELLA MATÓ A LA BESTIA EN EL PASO DE LA MUESTRA DE TEATRO POR ALDEAMAYOR

Juan J. Villalba  @Juanillo_v_p

Noche de ‘Muestra’ la que se vivió ayer lunes en el teatro de la Casa de Cultura ‘Adolfo Suárez’ de Aldeamayor de San Martín. El grupo de teatro ‘El Llano’ se examinaba ante el jurado de la trigésimo quinta edición de la Muestra Provincial de Valladolid que organiza la Diputación de Valladolid para grupos de teatro amateurs.

La obra con la que han concurrido este año los representantes de Aldeamayor ha sido King Kong, adaptación de la película del mismo título de 1933 y que desde entonces ha sido objeto de numerosas versiones cinematográficas.

La directora del grupo, Lola Salamanca, ya había trabajado sobre este tema y le seducía volver a hacerlo “por lo fascinante del personaje de King Kong” -al que define como  entrañable- y por todo lo que la historia nos cuenta”. Más allá del detalle del simio atacando y queriéndose llevar a alguien distinto a él, para la directora, que lleva más de tres lustros dirigiendo este grupo, en la película subyace “una lección de integración que pretende mostrar algo que sucede habitualmente en la sociedad como el hecho de estigmatizar a ciertas personas, atacándoles antes de ver su parte buena”.

Al margen de que la película esté catalogada como ‘de aventuras’, la actuación del grupo de Aldeamayor comenzó con suspense. El original montaje ideado por Salamanca combinaba la proyección de fragmentos de la cinta con la interpretación, una vez adaptados los textos, de los componentes de ‘El Llano’. “El proceso de la obra ha sido diferente porque los actores tienen poco texto y lo difícil ha sido entender cómo iba a ser un trabajo que no tiene nada que ver con  ninguno de los anteriores. Espero que todos los que han participado aprendan que se pueden hacer cosas diferentes y que hay muchas maneras de hacer teatro. Creo que les ha gustado esta experiencia”.   

La mala suerte quiso que justo cuando se emitían las primeras imágenes sobre la pared del escenario, la bombilla del reproductor se fundiera. Tras unos minutos de desconcierto por parte del público que casi llenaba la sala, hubo que improvisar y tirando de otro proyector de menos prestaciones, arrancar la función. Como afirmara el añorado Freddie Mercury, en una de sus últimas canciones “El show debe continuar”.

Durante unos cuarenta minutos cinco actores principales y toda una tropa de secundarios, caracterizados como la tribu de la isla donde reina el simio, dosificaron los cien minutos del metraje original. Muy buenas interpretaciones de Marcelo Sanz, como el director Carl Denham; Antonio Martín, como el galán Jack Driscoll; y Teo Domínguez, como  el Capitán Englehorn; muy divertidos los componentes sénior y benjamines de la tribu; y magníficas María Teresa Sacristán, en el papel de la rubia Ann Darrow; e Irene Domínguez, embutida en un disfraz de simio, como King Kong.

LA MUESTRA 2018

Con el del grupo de Aldeamayor son ya quince los montajes que se han representado  desde que arrancara esta edición de la muestra allá por el mes de septiembre en Montemayor de Pililla. Íscar el próximo día 30 y Renedo de Esgueva y Villanueva de Duero los días 1 y 2 de diciembre pondrán el punto y final a las actuaciones de 2018.

Como en años anteriores, los criterios que se valoran en las obras son la calidad del texto y de sus posibles adaptaciones, la puesta en escena, el vestuario, la dirección de montaje y el trabajo de interpretación. El Jurado de este año está presidido por la Diputada de Cultura y Publicaciones, Inmaculada Toledano, y cuenta con la participación de la actriz Marta Ruiz de Viñaspre, ganadora de un premio Max de Teatro; el actor y director en el grupo de Cigales Jesús del Val Morán; Rebeca Arribas, Sanz, del grupo de teatro La Cantera; Montserrat Cáceres Benito, del grupo Pedregal de Campaspero; y como secretario el técnico de gestión cultural Jesús Pastor Martínez.

Para Pastor el teatro aficionado de la provincia goza de muy buena salud tanto por “el mérito de los actores y actrices amateurs que invierten parte de su tiempo de ocio en ensayar un proyecto común como por el hecho de que muchos de los directores de los grupos de teatro han estado en la Escuela de Arte Dramático lo que garantiza tanto la selección del texto como la puesta en escena”.