EL OTRO GUARDAESPALDAS, SONRISAS PERFILADAS A TRAVÉS DE LA VIOLENCIA
Martha Tena Juárez
El nuevo film de Patrick Hughes combina a la perfección el género de comedia con el de acción.
Esta buddy movie rodada en Londres y Amsterdam evoca a esas cintas de los años ochenta y noventa, como Arma Letal o Huida a medianoche. Pero con un toque más cómico y paródico.
Comenzamos con ese póster descarado "somos" de la película El guardaespaldas. Incluyendo la primera secuencia que es una presentación del protagonista, con planos generales muy cuidados y complementados por la utilización de una fotografía y color oscuros, que solo consiguen tonos más claros en momentos claves y persecuciones. Pero no solo se muestra esto en la primera secuencia, en ésta se perfila los gags paródicos y lo cómico.
Aunque la trama es muy lineal, la interpretación de los protagonistas como Ryan Reynolds y Samuel L. Jackson hacen de esta comedia de acción una cinta atractiva.
El camino narrativo de este film se basa en una sucesión de secuencias de acción eternas mezclado en la mayoría de las secuencias con gags.
El guión, al igual que Pulp Fiction, se basa en estereotipos y una historia muy usada en cine. Uno de los mejores guardaespaldas del mundo, Michel Bryce (Reynolds), recibe el encargo de proteger a su enemigo, un asesino a sueldo, Darius Kincaid (Jackson) a quien un dictador bielorruso (Oldman) quiere verle muerto en menos de 24 horas.