El Ayuntamiento de Aldeamayor no abrirá las piscinas municipales
“Esta triste medida –se explica desde el consistorio- ha sido fruto de un sereno estudio de las circunstancias del servicio, así como de los -garantistas pero difícilmente cumplibles en la práctica- protocolos de actuación emitidos por el Ministerio de Sanidad y la Consejería de Sanidad de la Juntade Castilla y León”
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El Ayuntamiento de Aldeamayor ha informado a los vecinos, a través de un bando firmado por la alcaldesa en funciones, Virginia Almanza, que no se abrirán al público durante el verano de 2020 las piscinas municipales situadas en el núcleo urbano tradicional de la localidad.
El bando recuerda que desde el 14 de marzo de 2020, consistorio se ha visto obligado a adoptar todo tipo de decisiones, muchas veces anticipándose a las directrices oficiales, como la suspensión preventiva de actividades culturales, el cierre al público de todos los edificios municipales, la elaboración de protocolos de actuación y protección preventiva, instrucciones a empresas, puesta en funcionamiento de sistemas de atención no presencial, apoyo a los más vulnerables, etc.
Todas estas medidas, reiteran el bando, han tenido un único denominador común: hacer un ejercicio de responsabilidad y anteponer la seguridad y la salud del común de los vecinos sobre deseos o intereses. Así, se han pospuesto indefinidamente eventos característicos de nuestro municipio, como la celebración del Privilegio de Villazgo, la Feria del Autónomo, el certamen de folklore o las Semanas Verdes.
En esta ocasión, añade la publicación, “es necesario asumir una de las decisiones más complejas y duras: informar a todos los vecinos de Aldeamayor de San Martín que no se abrirán al público durante el verano de 2020 las piscinas municipales situadas en el núcleo urbano tradicional de Aldeamayor.
Explica el bando que las piscinas son uno de los espacios más concurridos del municipio en época estival, punto de encuentro de vecinos y visitantes de todas las edades, y lugar de esparcimiento, relajación y convivencia, difícilmente compatible con la debida garantía del cumplimiento de todas y cada una de las medidas de higiene y seguridad que aseguren la salud de todos los ciudadanos, a la par que se posibilite el uso de la misma sin agravios comparativos por todos los residentes en el municipio, con un coste juicioso para las arcas públicas (se estima una cuantía de no menos de 50.000 euros para poder abrir las piscinas, con aforo muy reducido y limitación de servicios).
“Esta triste medida -concluye el bando- ha sido fruto de un sereno estudio de las circunstancias del servicio, así como de los -garantistas pero difícilmente cumplibles en la práctica- protocolos de actuación emitidos por el Ministerio de Sanidad y la Consejería de Sanidad de la Juntade Castilla y León, de conversaciones reiteradas con estas administraciones supramunicipales y de la observación de decisiones similares tomadas por otros municipios si cabe con menos limitaciones de aforo en relación con su población que nuestro municipio. Caso de pecar de algo, entendemos que ha de ser de responsabilidad y prudencia”.