Cruz Roja evidencia que “el cuidado de las personas dependientes se conjuga en femenino, singular y privado”

  • En Valladolid, se han atendido a 66 personas dentro del proyecto Información, capacitación y apoyo a familias cuidadoras de personas mayores

Pueblosycomarcas.com@PueblosComarcas

Casi la mitad de las personas que cuidan a otras personas dependientes son familiares directos (un 47.5%); en su mayoría, además, tienen nombre de mujer (88.5%), lo que además de repercutir en su carga de tareas diarias, afecta a su salud física y mental.

El 62% de las personas que cuidan de dependientes pasa más de 6 horas al día realizando estas tareas, y 7 de cada 10 personas lleva más de 3 años cuidando a una persona. Esto afecta a las personas cuidadoras, especialmente en su tiempo libre, el cual se ve afectado en más de un 82% de los casos, y en su vida familiar (70%) y relaciones sociales en general (70%).

Por ello, Cruz Roja manifiesta la clara necesidad de cuidar a quién cuida: “es necesario que las personas cuidadoras aseguren su propio bienestar, respetando el tiempo para cuidarse y descansar, realizando ejercicios de relajación, diciendo ‘no’ a demandas excesivas, conociendo la enfermedad de la persona que está a su cargo, y, sobre todo, pidiendo ayuda y dejándose también ayudar, y cuidando sus propias relaciones sociales”.

El cansancio, la fatiga, los dolores de espalda o articulares, la frustración, la impotencia, la depresión, la soledad, la culpa, la ansiedad y el estrés o el insomnio son sólo algunos de los principales problemas de salud que Cruz Roja detecta entre personas cuidadoras; pese a que quienes los padecen sigan realizando sus tareas, hasta en el 57,5% de los casos, saben y creen que tienen que cuidarse porque este hecho le ha afectado a su salud.

Además, en el 63,5% de los casos, los cuidadores y cuidadoras no profesionales tienen una vida laboral activa, es decir, trabajan y cuidan a otra persona de manera simultánea. Sin embargo, este esfuerzo no siempre se ve reconocido: sólo 1 de cada 2 personas cuidadoras encuentran el apoyo y reconocimiento social que merecen, y menos de la mitad (45%) reciben ayuda económica por estas tareas. El apoyo psicológico, pese a los síntomas que experimentan, aún está sólo presente en el 41% de los casos.

Por todo ello, Cruz Roja reivindica en el Día de las Personas Cuidadoras (5 de noviembre) que se amplíe la oferta formativa en el sector, que se reduzcan las listas de esperas sanitarias, que se aumente la inversión en recursos, que se facilite la conciliación familiar, que se agilicen los trámites burocráticos, se investigue y sensibilice más a la sociedad y se dé mayor difusión de la red de servicios disponibles para personas dependientes. Además, Cruz Roja también pide y promueve espacios de encuentro para personas cuidadoras.

Sin embargo, desde Cruz Roja no sólo se pone el foco en el lado negativo de la situación; Aurora González, responsable de los proyectos de ‘Atención a personas cuidadoras’ y el ‘Multicanal SerCuidadorA’, señala que “cuidar a alguien también significa estrechar lazos, aprender a hacer cosas nuevas… el cuidado y lo que supone cuidar es un trabajo importante, serio y comprometido, pero tiene su parte positiva”.

CRUZ ROJA EN VALLADOLID CUIDA A QUIEN CUIDA

Las personas cuidadoras no profesionales que prestan su apoyo y atención en el domicilio son todavía poco visibles; aunque con la pandemia esta situación se ha evidenciado algo más, es importante respaldar y poner en valor su trabajo ante la sociedad.

Así, en Valladolid a través del proyecto Información, capacitación y apoyo a familias cuidadoras de personas mayores se han atendido a 66 personas a lo largo de este año. De esta forma, Cruz Roja capacita, orienta, da respiro y ofrece grupos de apoyo mutuo a las personas que comparten esta tarea. Para ello, se realizan talleres, sesiones o encuentros en los que las personas cuidadoras conversan y comparten sus experiencias.

Este proyecto está subvencionado por la Junta de Castilla y León – Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades y que está financiado con cargo a la asignación tributaria del 0,7% del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas para la realización de Programas de Interés General.

Gracias al voluntariado, la actividad de respiro proporciona a las personas cuidadoras tiempo para poder realizar otras actividades no centradas en el cuidado de la persona mayor mientras Cruz Roja se queda al cuidado de esa persona. Así, pueden aprovechar para hacer tareas cotidianas, como ir al a compra o a la farmacia, o permitirse un momento de desconexión dando un paseo, participando en un taller de ocio, o incluso acudiendo al cine o el teatro, si lo desean.

MULTICANAL SERCUIDADORA

Cruz Roja a nivel nacional, además, dispone de una herramienta esencial para la atención de este grupo de personas: el ‘Multicanal SerCuidadorA’, que cuenta con redes sociales, una página web y una app (IOS/Android) con contenidos de interés que van desde guías de ayuda, infografías de interés, o libros y películas recomendados. También incluye una píldora formativa dirigida a quienes van a empezar a cuidar en breve, a quienes ya llevan tiempo haciéndolo y a quienes están interesados en el ámbito de los cuidados. Además, la Organización quiere visibilizar a quienes cuidan y sensibilizar al resto de la sociedad sobre el tema a través de la iniciativa #MiraQuienCuida que pone en valor su aportación.

Este proyecto también cuenta con un teléfono gratuito, el 900 365 100, con personal especializado para atender consultas sobre los cuidados, el mail sercuidadora@cruzroja.org, y el WhatsApp 678 480 951 (solo mensajes).