90 años de “la cuestión”: Tumultos y desórdenes en San Roque, Aldeamayor 1924

Estos días de las Fiestas patronales de San Roque de Aldeamayor no siempre han tenido el carácter tranquilo, religioso y festivo que debe ser la base para fomentar la unión y el encuentro entre los de casa y los forasteros.

P. Celso Prieto Bermejo O. Carm

Ya no queda nadie en el pueblo que en aquel año de 1924 tuviera la suficiente edad como para contarlo ahora como testimonio de primera mano.  Muchos de nosotros, de los cuarenta y cincuenta, hemos oído hablar de esta “Cuestión” pero muy pocos logramos que nos lo contaran los personajes implicados. Los testimonios orales fueron transmitiendo lo hechos, pero siempre encubiertos de un halo de misterio y de “omertá”. Como si nadie quisiera descubrir algo nuevo o citar nombres de los que intervinieron más directamente o fueron llevados Valladolid en cuerda de presos.

Por eso al narrar aquellos hechos he prescindido de los testimonios orales que muchos oímos en la juventud y que siempre desvirtúan la realidad al pasar de boca en boca. Por ello me remito a los documentos escritos de los hechos a los que estamos haciendo referencia.

El mismo nombre que el pueblo dio a este acontecimiento implica una referencia indirecta, como si no se quisiera hablar de ello claramente. Siempre se ha conocido con el nombre de “La Cuestión”, o si quieren, más popularmente  “LA CUSTIÓN”.   ¿Por qué no el Problema? ¿El tema? ¿El asunto? Aquí siempre fue “LA CUESTIÓN”. Ignoro como se pudo acuñar este término, seguramente en un proceso oral, para hablar de aquello hechos de una manera eufemística.

Las fuentes

Personalmente he consultado tres testimonios escritos de la época a que se refieren los hechos de la “Cuestión”.  El primero que hallé fue la noticia redactada en la página 15 del ABC de Madrid, del martes,  día 19 de agosto de 1924, edición nacional, ya que por entonces sólo existía esta edición. El precio del ejemplar era de diez céntimos. En Madrid la suscripción para un mes era de tres pesetas. Y la suscripción en provincias por tres meses nueve pesetas.

La verdad es que algunos habían ponderado tanto los hechos que afirmaban haber sido  primera página del ABC, por lo que cabía pensar que ciertamente fuera un hecho de tal conmoción en la vida de esta época, que mereciera dicho tratamiento periodístico.

Algo así como en el año 1987, el 15 de septiembre, cuando la edición del telediario de la tres de la tarde de TVE abría con el testimonio en directo desde Aldeamayor del asedio al que estaba siendo sometido el pueblo por parte de las fuerzas de seguridad del estado para localizar a los asesinos de varios guardias y policías.

La segunda fuente escrita es la información ofrecida por el Norte de Castilla   el día 19 de agosto de 1924, martes, ya que como muchos de ustedes recordarán, esto de la edición de los lunes de los periódicos es algo relativamente reciente. En este medio de información los hechos  fueron destacados en primera página con un amplio y prolijo reportaje que continúa en páginas interiores.

La tercera fuente es el periódico LA VOZ, diario independiente de la noche, de Madrid,  del día 18 de agosto de 1924. Ya advierte en su cabecera que este número ha sido revisado por la censura militar. De forma sucinta lo narra de esta manera: 

“LAS CAPEAS; Los mozos se amotinan porque no se corren vacas.

En Aldeamayor de San Martin VALLADOLID 18 (12 n.).-~En Aldeamayor de San Martín se produjo ayer un tumulto por negarse el alcalde a la pretensión de un

grupo de mozos, que a todo trance quería que se corrieras unas vacas.

Un numeroso grupo invadió el salón de sesiones del Ayuntamiento, exigiendo la celebración de la corrida. El alcalde solicitó el auxilio de la Guardia Civil, que desalojó el salón. Una vez en la calle los amotinados, y hallándose en la puerta de la Casa Consistorial la pareja, de la Benemérita, del grupo de vecinos partieron varias

piedras, y una de ellas hirió en la cara al guardia Gabriel Herrero.

Las autoridades locales intentaron dar cuenta de lo ocurrido al gobernador civil, pero varios vecinos lo impidieron; pero enterado el capitán de la Benemérita don Isidro Cáceres, llegó a Aldeamayor con varías parejas y logró dominar

el tumulto. Se han practicado once detenciones.

La cuarta fuente escrita que cabría esperar serían las Actas de las sesiones del Ayuntamiento de la localidad. Sin embargo en ninguna de ella se hace referencia a los hechos y se ciñen estrictamente  los acuerdos administrativos propios de la época.

El año 1924 venía sin esperanza y la cosecha estaba resultando ciertamente mala. Volvían a repetirse en el mundo rural las tensiones que se habían producido en el campo castellano a principios de siglo. Un periodo de malas cosechas y bajos salarios para los jornaleros habían hecho que estos se organizaran forzando huelgas. Podemos recordar aquí, cómo en Aldeamayor no se estuvo ajeno a este proceso de la creación de los Círculos Católicos de Obreros, en un intento de fundar un fondo solidario de ayuda y asistencia en los momentos de mayor dificultad, 1906.

Tan malo venía el año 24 que en las Actas de las Juntas del Ayuntamiento de los meses anteriores al verano  se deja constancia de los vecinos que pedían ayudas perentorias para poder sobrevivir.

El verano

De todas maneras parece que el verano había apartado un poco esta visión tan negativa del momento. Las páginas del ABC y del Norte están llenas de curiosidades de esa época.

Las fiestas de San Roque cayeron en fin de semana. El 15, día de la Virgen era viernes, como este año 2014.  Sábado, 16, San Roque y domingo 17, las “Vacas”. Bueno, las vacas que no fueron corridas.

El viernes fue un día caluroso, con amago de tormentas, pero no cayó ni una gota. Solo en el litoral gallego había algunas nubes. La temperatura máxima fue de 37 grados en Murcia y la mínima de nueve grados en Cuenca. En Madrid, por ejemplo, la máxima fue de 31 grados y la mínima de 18,9.

En la página 16 del ABC, del 19 de agosto, donde se narra la noticia de “El tumulto por una capea”,  aparece Aldeamayor junto a la noticia que le sigue: “el veraneo de la familia real en Santander”, que había asistido a misa en el Palacio de la Magdalena de Santander. Y el día anterior habían tenido verbena en el campo de tenis a la que asistieron varios aristócratas. En Santander se celebra el día 21 la Fiesta de la Flor. El príncipe de Asturias y el Infante don Jaime se hallaban en Torrelavega en un partido de futbol.

También se hallaban los periódicos llenos de noticias taurinas. En la misma columna de nuestro ya conocido “Tumulto”, aparecen las fiestas y ferias de Toledo. Por Gijón andaban haciendo grandes faenas Sánchez Mejía, Marcial Lalanda y Nicanor Villalta, además de Valencia II, Nacional II y el Algabeño. En Bilbao vivían  la semana grande,  y en la primera de Feria, con toros de Murube, actuaban Chicuelo, Maera y Algabeño. En la segunda, con Miuras, se las veían Márquez, Lalanda y Algabeño.

La Virgen se lleva la fiesta bajo diversos nombres: El Rosario en Toledo; Las Nieves en Granada; El  Carmen Málaga; Y el Prado en Ciudad Real.

Noticias que parecen actuales. Incendios varios de pinares en Almansa y Bilbao. La guerra de Africa está en un momento difícil y el general primo de Rivera regresa urgentemente desde Santander a Madrid a analizar la situación crítica por la que pasaba la guerra de Africa.

Más llamativa es la insistencia que en esos días hace referencia a una intoxicación, ¡Pásmense ustedes! por garbanzos, en Barcelona. Preocupante también la desaparición de tres niñas desde mayo en Vallehermoso. De moda andaban en esos días las playas de San Sebastián, Gijón y Santander.

El día 17 de agosto sufre una agresión por parte de algunos vecinos el alcalde de Algatocín, un pueblo de la Serranía de Ronda, en la provincia de Málaga. En Santiago del Arroyo, en una sangrienta reyerta por discusiones familiares, se produce  un muerto y varios heridos. En Cantalpino (Salamanca), un muerto por asta de toro en las fiestas. Como fiestas  taurinas también se celebran en Fresno el Viejo  y Tudela.

El pueblo  –  la cuestión

Semanas anteriores a las fiestas de San Roque de 1924 el Ayuntamiento ya había comunicado al pueblo que no habría vacas debido a las escasas disponibilidades económicas que había y la evidencia de que muchos vecinos se dirigían al consistorio para solicitar ayuda perentoria para sobrevivir.

A medida que se acercaban las fiestas la presión de los mozos y casados jóvenes iba creciendo hasta desembocar en los hechos que vamos a comentar tal como lo hicieron los dos medios de comunicación a los que antes aludía, el ABC y El Norte de Castilla.

El ABC del martes, 19 de agosto de 1924, en la única edición que se publicaba en aquel momento,  en la página 15, narraba los acontecimientos y titulaba la noticia de esta manera:

“Tumulto por una capea”

Valladolid 18.  “En Aldeamayor de San Martín se produjo ayer un tumulto popular por negarse el alcalde a la pretensión de un grupo de mozos que a todo trance quería que se celebrara una novillada de vacas. Un numeroso grupo invadió el salón de sesiones del Ayuntamiento, exigiendo la celebración de la corrida. El alcalde solicitó el auxilio del guardia civil, cuyas fuerzas desalojaron el salón. Una vez en la calle los amotinados,  y, hallándose en la puerta de la casa consistorial la pareja de la Benemérita, del grupo de vecinos partieron varias piedras y una de ellas hirió en la cara al guardia Gabriel Herrero.

Las autoridades locales intentaron dar cuenta de lo ocurrido al gobernador civil, pero varios vecinos lo impidieron; pero enterado el capitán de la Benemérita, Don Isidro Cáceres, llegó a Aldeamayor con varias parejas y logró dominar el tumulto. Se han practicado varias detenciones.”

El Norte de Castilla daba la siguiente versión de los hechos en su diario del martes, día 19 de  agosto de 1924:

“DESÓRDENES EN ALDEAMAYOR”

EL ALCALDE DENIEGA LAS VACAS

EL PUEBLO SE AMOTINA

GUARDIA CIVIL HERIDO, ONCE DETENIDOS

“El sábado último se desarrollaron en el pueblo de Aldeamayor de San Martín algunos desórdenes que tuvieron por origen haberse negado el alcalde a dar las corridas de vacas que venían celebrándose desde tiempo inmemorial el día 17.

En poco estuvo que hubiera un día de luto en Aldeamayor pero por fortuna, los sucesos carecen de la importancia que en un principio se supuso en Valladolid al recibirse las primeras noticias.

Desde hacía algún tiempo reinaba en el pueblo vivo descontento por el anuncio que el alcalde hizo de la suspensión este año de las tradicionales corridas de vacas.

Algunas comisiones de vecinos visitaron oficialmente al alcalde para pedirle que no se prescindiese de un festejo que creían indispensable. El alcalde les hizo saber que el estado económico del Ayuntamiento este año le impedía celebrar este festejo. Reiteraron los vecinos la demanda y el alcalde insistió en la negativa.

El viernes último se dirigieron al Ayuntamiento los mozos del pueblo y gran parte de los casados jóvenes y una vez en el despacho del alcalde volvieron a pedir las vacas, que el alcalde denegó por última vez.

Desde aquel momento latía la protesta unánime del pueblo que exteriorizó al día siguiente al terminar la procesión. El sábado, fiesta de San Roque, una vez entrada en la iglesia la procesión, se dirigieron en masa mozos y casados al ayuntamiento donde insistieron ya violentamente en que habían de correrse las vacas.

El alcalde, viendo que los ánimos estaban excitadísimos, requirió el auxilio de la pareja de la Guardia Civil del puesto de Boecillo que había asistido a la procesión.

La pareja trató de disolver la manifestación. Empezaron a volar  piedras. Un pedazo de ladrillo hirió en la cara al guardia civil Gabriel Herrero, el cual, al sentirse herido, hizo un disparo al aire. La bala rebotó en alguna pared y de rechazo hirió levemente a un chico. Al ruido del disparo quedó disuelta la manifestación. El alcalde mandó a un guarda jurado a Tudela para telegrafiar a Valladolid dando noticia de lo que ocurría.

En cuanto aquí se supo salió a caballo para Aldeamayor el teniente coronel primer jefe de esta Comandancia Don Aurelio Morazo con varias parejas de caballería.

De Tudela marchó el capitán D. Isidro Cáceres, avisado por el teniente coronel, llevando otras parejas . Al mismo tiempo se dispuso el envío de otras parejas de los puestos de la Cistérniga, Boecillo y Arrabal de  Portillo. En total se concentraron en Aldeamayor 21 guardias al mando del jefe de línea teniente D. Luis Olivares.

También salio para Aldeamayor el camión de la Brigada Sanitaria  con un servicio completo de ambulancia y el médico D. Ramón Valverde. Inmediatamente de llegar el señor Morazo a Aldeamayor se procedió a las pesquisas para averiguar quienes fueron los autores del alboroto. Fueron detenidos como presuntos autores once personas. (Omito en este trabajo el nombre y apellidos de los detenidos)

El primero de los detenidos, S. G., se supone es el autor de la pedrada al guardia Herrero; y a J. T. y E S. se les acusa de negar auxilios a la Benemérita.

El guardia herido fue trasladado en el camión de la brigada sanitaria al pueblo de Boecillo donde tiene su residencia. Los once detenidos fueron traídos a la cárcel de esta ciudad, donde quedaron a disposición del juzgado especial que entiende en el asunto. El teniente coronel jefe, Señor Morazo, antes de regresar a Valladolid dejó montados los servicios de vigilancia con varias parejas de la Benemérita y el Capitán D. Isidro  Cáceres para evitar que volviera turbarse la tranquilidad.

Como juez instructor ha sido designado el teniente jefe de línea D. Luis Olivares Guía”.

Conclusión

Estamos ya en pleno ambiente de fiestas patronales de San Roque 2014. Actividades religiosas, populares, culturales y lúdicas llenarán las horas de varios días para que cada uno a su manera participe en lo que quiera. Pero  reconozcamos que hay otras variables poco controlables como la laxitud de la noche, los vapores de sustancias, las euforias y desmadres del alcohol, los escondites de las peñas… Tengamos la fiesta en paz y con respeto, tolerancia y buen hacer sean días de alegría y encuentro con quienes mantenemos vivos nuestros vínculos de Aldeamayor.

No lo marrotemos todo por “un quítame allá esas vacas…”